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Los musulmanes contraatacan con la llegada de las nieves

Las fuerzas bosnias están contraatacando con éxito a las milicias serbias al tiempo que el crudo invierno ha dado señales de comenzar. Las primeras nieves cayeron ayer sobre Sarajevo y gran parte de Bosnia, donde las temperaturas alcanzaron 10 grados bajo cero, incrementando el sufrimiento de la población civil. La capital bosnia, que lleva nueve meses bajo el asedio serbio, carece de agua corriente, energía eléctrica, teléfono y alimentos.Según fuentes de los servicios de inteligencia en Bosnia central, las fuerzas musulmanas y croatas han obligado a los serbios a retroceder unos 20 kilómetros en las últimas dos semanas. La ofensiva empezó cerca de Varalici y siguió hacia el norte, casi hasta la carretera que une las ciudades de Zepce y Banovici. La carretera todavía en manos serbias, pero ya no es tan segura como antes para el movimiento de sus tropas.

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Las fuerzas gubernamentales bosnias tan sólo están a dos kilómetros de distancia de esa ruta, y su conquista les daría un valiosa vía de suministros. También permitiría a los convoyes humanitarios alcanzar áreas actualmente accesibles sólo por caminos montañosos.

No es posible conocer la situación militar en torno a Sarajevo debido a la ruptura de las comunicaciones, pero diversas fuentes confirman que se está produciendo un reforzamiento de las posiciones musulmanas dentro y fuera de la capital como preparación para una importante ofensiva.

En Belgrado, los socialistas han exigido al Parlamento yugoslavo votar hoy contra el primer ministro federal, Milan Panic, en una moción de censura presentada la víspera de las elecciones del pasado día 20 por los diputados del Partido Radical (ultranacionalista) de Vojislav Seselj. Los consejeros de Panic consideran que éste podría dimitir antes de verse sometido al voto de censura.

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