Muere Albert King, uno de los grandes intérpretes del 'blues' urbano

Albert King, el más creativo de los músicos de blues hasta finales de los años setenta, falleció el pasado lunes en Memphis (Tennessee), a los 69 años, a causa de una crisis cardiaca. Por su estilo como cantante y guitarrista, King influenció poderosamente a los músicos blancos de la generación de los sesenta, como Eric Clapton y Peter Green, e impulsó el lanzamiento de un nuevo camino para el rock, inspirado en las raíces más profundas de la música negra. Zurdo, fumador empedernido y con un directo apabullante, Albert King conservó la esencia rural y primaria del blues urbano.

Albert Nelson, conocido artísticamente como Albert King, nació en Indianola (Misisipi) el 25 de abril de 1923, aunque algunas biografías datan su nacimiento en 1924. Creció en el seno de una familia de 13 hermanos y desde muy joven siguió los pasos de todos los artistas negros de su generación con el inevitable aprendizaje cantando en iglesias y en grupos de gospel, antes de introducirse en el blues con la compañía de una guitarra de fabricación casera.En 1950, Albert King dio en Chicago los últimos toques a su aprendizaje tocando la batería en los grupos de Eddie Taylor y Jimmy Reed. Tres años más tarde realizó sus primeras grabaciones para Chess Records, con un estilo que recordaba a Elmore James, pero que ya apuntaba personalidad propia.

El éxito le llegó con sus discos grabados para la casa Stax, de Memphis, acompañado por músicos de las características de Booker T. Jones, Steve Cropper y The Bar-Keys, que enlazaban el blues con la música soul.

Menos sofisticado que su contemporáneo B. B. King y más próximo a las raíces del blues rural, el estilo vocal de Albert King se inspiraba en los de Jimmy Whiterspoon y Joe Turner, con una voz profunda y matizada, suave y expresiva en los finales. Modernizó la aspereza de sus primeros maestros -Elmore James, Howlin-Wolf, Willie Johnson y Robert Nighthawk- y a finales de los años sesenta puso el blues al alcance de los nuevos grupos que como Fleetwood Mac -liderado por Peter Green- o Cream -con Eric Clapton- comenzaron una nueva época dentro del rock: la que se inspiraba en las raíces más profundas de la música negra renegando del pop que tenía en Los Beatles su punto de referencia.

Durante los años 70 y 80, Albert King continuó grabando, aunque a veces cayó en la trampa de las grandes orquestaciones que intentaban suavizar su estilo para ponerlo al alcance de públicos más amplios. Pero junto a su guitarra Lucy, Albert King continuó grabando buenos discos en directo, como el doble álbum realizado en Montreux. A pesar de la ralentización de su carrera durante los últimos años, Albert King tenía previsto realizar una gira por Europa en 1993.