El fiscal no acepta el perdón otorgado por un juez a una suplantación en un examen

El fiscal ha presentado un recurso contra la decisión del juez Ignacio Bigeriego de exculpar a los dos amigos -uno de ellos alumno de la Universidad Autónoma de Madrid- que estuvieron detenidos durante 48 horas por suplantar uno a otro en un examen de fin de carrera. El juez Bigeriego, titular del Juzgado de Instrucción número 25 de los de Madrid, archivó la causa en septiembre al entender que la conducta del estudiante y de su amigo no era, en su opinión, constitutiva de delito.

Incluso entendió "desproporcionado" que ambas personas hubieran estado detenidas por ese motivo durante 48 horas en la comisaría del distrito de Fuencarral (ver EL PAÍS del pasado 3 de octubre).Contra la decisión que adopté el juez Bigeriego tras tomarles declaración en el juzgado de guardia, el fiscal presentó un primer recurso, que fue desestimado por el magistrado. Después, según la abogada del estudiante, Marta Checa, el fiscal ha presentado un recurso de reforma y subsidiario de apelación ante la Audiencia Provincial de Madrid en caso de que el juez volviera a desestimarlo, como así fue.

El fiscal no explica en el escrito de apelación en qué se basa para diferir del criterio del juez, indican fuentes del despacho de la abogada del estudiante. Este periódico intentó ayer, sin éxito, localizar al acusador público.

Las citadas fuentes aseguran que las autoridades académicas de la Universidad Autónoma no han tomado ninguna medida aún contra ambos amigos, a la espera de que se produzca la definitiva resolución judicial.

La Audiencia deberá pronunciarse ahora sobre si Javier S. G., de 25 años y alumno de económicas de la Universidad Autónoma, y José L. C., de 29 años y quien hizo el examen al anterior, cometieron algún acto ilícito penal. Los hechos sucedieron el 8 de septiembre. El estudiante, que se enfrentaba a su último examen de matemáticas financieras y no lo había preparado bien, acordó con su amigo que se presentara por él a la prueba.

El amigo, que le había dado clases de esa asignatura en el verano, llevó una fotocopia, muy borrosa, del DNI del estudiante. Este hecho extrañó a la profesora, Sofía de la Maza. Al percatarse de la anomalía, la examinadora comunicó el hecho a las autoridades académicas, y éstas, a los guardias de seguridad, y éstos, a su vez, a la policía, que detuvo durante 48 horas a ambos.