El obispo de Lérida no ve inconvenientes para la ordenación de la mujer

El obispo de Lérida, Ramón Malla, dijo ayer que "la mujer no tiene ningún inconveniente para ser sacerdote". La mujer, a su juicio, puede desempeñar el sacerdocio: "No hay ningún argumento en la Biblia que lo prohiba, ni ningún documento teológico que lo impida". Malla añadió que acepta la interpretación "que ha hecho la Iglesia de la voluntad de Jesucristo, que es que las mujeres no pueden ser sacerdotes".El Vaticano recordó con fuerza esta posición tras la decisión de la Iglesia anglicana de Inglaterra, que el 11 de noviembre votaba a favor del sacerdocio de la mujer. Unas 1.400 diáconas -estadio previo al sacerdocio- de esa iglesia serán ordenadas sacerdotes dentro de dos años.

El obispo de Lérida señaló qué 1a mujer no tiene ningún inconveniente que le impida ser sacerdote por el hecho de ser mujer; es decir, que, por ejemplo, puede guardar el secreto de confesión". No obstante, recordó que la "interpretación que la Iglesia católica ha dado siempre a la voluntad de Jesús es que las mujeres no sean sacerdotes".

Numerosos colectivos católicos piden desde hace años que la mujer acceda al sacerdocio, cuestión que Karl Ralmer, teólogo alemán ya fallecido, vaticina en una publicación póstuma "que será una realidad dentro de dos o tres siglos".