60.000 empresas obligadas a declarar cada tres meses sus ventas a la CE
La supresión de las fronteras intracomunitarlas dentro de 40 días supone la desaparición absoluta del control aduanero sobre mercancías y personas. Los conceptos de importación y exportación dentro de la Comunidad desaparecen, pero para poder controlar el volumen de intercambio dentro de la CE, la Administración española, de acuerdo con las exigencias comunitarias, obligará a las empresas que compren o vendan mercancías por un importe superior a los 3,5 y 4 millones de pesetas, respectivamente, a declarar cada tres meses sus intercambios con algún país socio de la Comunidad.
Esta medida afectará en España a unas 60.000 empresas, según datos de la Comisión Europea. Sin embargo, el límite mínimo que exige la CE para hacer esta "declaración estadística" es de 100.000 ecus (13.800.000 pesetas) que, según cálculos comunitarios, afectaría a 35.000 empresas de la Comunidad Europea.
La desaparición de las barreras internas permitirá una ahorro de hasta 24.000 millones de ecus (3,3 billones de pesetas), gracias a la supresión de controles fronterizos y las formalidades administrativas, según refleja el informe Cecchini, que sirvió de base para elaborar el Libro Blanco sobre la plena realización del mercado interior.
La supresión de las aduanas, explicó ayer el director de Aduanas e Impuestos Indirectos de la Comisión, Carlos Muñoz Betemps, supone un ahorro de 60 millones de documentos al año. El colectivo más afectado por la pérdida de control aduanero será el de agentes y comisionistas de Aduanas, que está formado por 85.000 personas en toda la Comunidad, según datos de Ceclat, la asociación que los agrupa.
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