El Museo del Prado ganará 15.000 metros cuadrados y tres niveles subterráneos

La ampliación del Museo del Prado, una necesidad reclamada y frustrada en las últimas décadas, será posible a partir del próximo año con la realización de un proyecto que pretende ganar 15.000 metros cuadrados en la fachada norte, en el espacio de acceso por la puerta de Goya. A partir de una idea de recuperación histórica, se vuelve al perfil original del arquitecto del museo, Juan de Villanueva, con una rampa hasta la planta principal con tres niveles subterráneos dedicados a espacios públicos. El proyecto recuerda los accesos del Louvre, pero sin la pirámide de cristal de Pei.

La búsqueda de espacio para el Museo del Prado, que tiene más cuadros, unos 3.000, en los almacenes que en las salas, y un diseño de acogida y circulación del público -la pinacoteca es visitada por un millón y medio de personas cada año- han sido las peticiones más insistentes del actual director, Felipe Garín, y del anterior, Alfonso E. Pérez Sánchez. La compra en 1985 del palacio de Villahermosa por 3.485 millones de pesetas iba a aportar 15.000 metros cuadrados de exposición y servicios, que al final han servido como sede del Museo Thyssen-Bornemisza.La nueva ordenación de las colecciones estatales, con el acuerdo entre el Museo del Prado y el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, junto con el traslado del Guernica, de Picasso, forzó el compromiso del ministro de Cultura, Jordi Solé Tura, para buscar la necesaria ampliación con el actual Ministerio de Agricultura, dedicado a las colecciones del siglo XIX, así como la reforma del Casón del Buen Retiro, para el arte del siglo XVIII. Mientras llegan esas ocupaciones, el presupuesto del Prado para 1993 tiene un incremento de 358 millones de pesetas respecto al año anterior, que se dedicarán a inversiones para ampliar el museo.

El proyecto para aumentar espacios para exposiciones y servicios, junto con una nueva distribución y circulación del público, se sitúa en la zona del actual aparcamiento del Museo, en la puerta de Goya, limitado por el paseo del Prado y los terraplenes de la calle de Felipe IV, y el fondo con la iglesia de los Jerónimos.

Terraplén

El nuevo perfil se parecerá al original que no llegó a ver terminado el arquitecto Juan de Villanueva, que figura en los estudios sobre la época, por las especiales condiciones del terreno. El acceso a la planta principal se realizaba por un terraplén y la planta baja quedaba oculta como una cripta subterránea sin luz natural, dedicada a la exhibición de esculturas. Durante el reinado de Alfonso XII, la cota del terreno desciende hasta la planta baja y se abre una nueva entrada con unas monumentales escaleras de Jarreño. Es la imagen actual.Sobre el perfil imaginario de la rampa de Villanueva se van a ganar 15.000 metros cuadrados, con un presupuesto de 2.000 millones de pesetas. El actual edificio Juan de Villanueva, construido a finales del siglo XVIII, tiene una superficie total de 38.374 metros cuadrados y una útil de 28.677 metros cuadrados. Este año terminaron obras de acondicionamiento, iniciadas en 1976, que han afectado sobre todo a los sistemas de climatización, iluminación, seguridad, talleres de restauración, nuevas salas y almacenes.

La realización del proyecto, obra del arquitecto del museo, Francisco Rodríguez Partearroyo, que durará dos o tres años, ocupará tres niveles, todos ellos subterráneos. Las superficies ganadas se dedicarán a la circulación de los visitantes, que tendrán accesos a la planta baja (actualmente con exposiciones temporales) y principal (salas de la escuela italiana); vestíbulos y servicios públicos (librería, tienda, restaurantes), así como salas de exposiciones y despachos de la administración del museo, actualmente dispersos por el edificio. El exterior tendrá un remate de jardinería, con un minucioso respeto por el entorno vegetal actual, y una entrada a la planta principal.

Solé Tura tiene la intención de presentar todo el proyecto, con maquetas, vídeos de animación y planos, en la última semana de este mes, tras informar del mismo al Consejo de Ministros y al real patronato del Museo del Prado, que tiene prevista una reunión el día 24, aunque la permanente celebró una el pasado día 11.

En la memoria de 1991 del Ministerio de Cultura, sobre el Museo del Prado se dice que entre los grandes ejes de orientación del mismo figura "a medio y largo plazo la búsqueda de soluciones a la limitación de espacio". Entre el edificio Villanueva y el Casón del Buen Retiro, el Prado recibió dos millones de visitantes, lo que arroja una afluencia media diaria de 5.660 personas. Con el proyecto en marcha, el principal museo de España acomete la reforma de otros edificios históricos semejantes que, como el Louvre, actualizan sus accesos con ejemplos arquitectónicos.