Israel torna a la mesa sobre refugiados entras siguen los combates en Líbano

El Gobierno israelí decidió poner fin ayer al boicoteo que mantenía contra la mesa sobre refugiados, dentro de las conversaciones multilaterales sobre la paz en Oriente Próximo. Tel Aviv cambió de actitud ayer al recibir garantías de que la delegación palestina no estaba vinculada a la OLP (Organización para la Liberación de Palestina). Mientras tanto, los combates se recrudecieron ayer en el sur de Líbano.Guerrilleros proiraníes de Hezbolá mataron ayer a un casco azul de las Naciones Unidas, de nacionalidad nepalesa, e hirieron a tres más en el sur de Líbano, según informó un portavoz de la ONU. Son ya 188 los soldados de la organización internacional muertos en Líbano desde el envío de una fuerza de paz a este país, en 1978. La guerrilla integrista atacó también una posición israelí al límite de la zona de seguridad impuesta por Tel Aviv en territorio libanés.

Por otra parte, un soldado israelí y un miembro de la guerrilla proiraní de Hezbolá murieron ayer en enfrentamientos en la misma zona de Líbano, según informaron fuentes militares israelís. En los mismos choques, dos soldados israelíes resultaron herdiso en la autoproclamada zona de seguridad en el sur de Líbano, y un miembro de Hezbolá fue capturado.

"Israel combatirá contra los terroristas como si no hubiese conversaciones de. paz, y no les daremos derecho de veto [en las conversaciones]", advirtió ayer el ministro israelí de Asuntos Exteriores, Simón Peres, quien añadió: "La paz no es algo que regalamos a los árabes". Peres excluyó sin embargo cualquier extensión de la zona de seguridad hacia el norte como exige la oposición derechista.