El PSOE aceptará las enmiendas que amplíen el control presupuestario

El grupo socialista está dispuesto, por primera vez, a asumir algunas enmiendas al proyecto de presupuestos planteadas por el grupo popular, y que cuentan con el respaldo general de la oposición parlamentaria. Se trata de ampliar el control que el Parlamento puede hacer sobre la ejecución de los presupuestos -en evolución de ingresos- gastos, déficit y deuda pública-. La aceptación de estas enmiendas se hará en el debate en pleno, pues el PSOE quiere evitar un plante como el del año pasado.

La comisión de presupuestos debatió ayer, a puerta cerrada en el Parlamento, qué enmiendas podrían introducirse en el informe de la ponencia, es decir, en el texto que asume el PSOE, y cuáles podrían aprobarse a lo largo del debate parlamentario. Según fuentes que asistieron a la reunión, el grupos socialista enumeró medio centenar de enmiendas de la oposición que está dispuesto a debatir con la idea de transformarlas en transaccionales e introducirlas, por tanto, en la ley de presupuestos.Fuentes del grupo socialista añadieron que el objetivo es aprobar esas enmiendas durante el debate en pleno de la ley, que se celebrará en la semana del 16 al 20 de noviembre, en lugar de incluirlas en el dictamen de la ponencia, que es el que resulta de un largo debate en comisión que comenzará el lunes. Al aceptar las enmiendas en el pleno el PSOE quiere evitar "un espectáculo" como el que se produjo el pasado año durante ese debate, en el que todos los diputados de la oposición -animados por Miquel Roca- abandonaron el hemiciclo como crítica al rechazo sistemático que el partido del Gobierno ofrecía a sus enmiendas.

Subida de pensiones

El grupo socialista confía además en un colchón no esperado de fondos, en el caso de que la inflación de este mes y el próximo se modere tanto como la de septiembre. El motivo es que si la inflación anual (los últimos 12 meses) queda en noviembre por debajo del 6,4%, la subida de las pensiones no tendrá que llegar a esa tasa, toda vez que el compromiso del Gobierno es mantener una subida igual al IPC que resulte en el penúltimo mes del año. Cualquier décima que quede por debajo de ese 6,4% facilitaría unos fondos ya presupuestados y que se destinarían a financiar parte de las enmiendas del PSOE (unos 3.000 millones de gasto adicional) y las que se pacten la oposición.Con todo, el grupo de enmiendas más relevantes -las que acentúen el control presupuestario por parte del Parlamento- no suponen ningún gasto adicional sino una cesión política desde el Ejecutivo. Quedan por ver las medidas concretas de control que, finalmente aprobará el PSOE. Con esta idea, los diputados de este grupo que trabajan en la discusión presupuestarla se reunirán el viernes con representantes de los ministerios de Hacienda y de Relaciones con las Cortes para analizar las propuestas.

Junto a estas enmiendas que no elevan el gasto público, el PSOE intentará alcanzar un acuerdo con los distintos grupos para aunar las enmiendas que solicitan más inversión para mejorar las costas, que han planteado principalmente los grupos nacionalistas -PNV y CiU- pero sin limitar la inversión a un territorio concreto. Otro campo de enmiendas se dirigen a la educación, y en concreto a los colegios concertados.