Un atlas histórico dibujará en 1993 el crecimiento de la capital

La caída del muro de Berlín señaló el inicio de un nuevo tiempo para los cartógrafos, obligados a rehacer los mapas del mundo. A una escala más pequeña, aunque exhaustiva, la Universidad Autónoma y la empresa informática Siemens Nixdorf firmaron ayer un convenio para elaborar un atlas histórico de Madrid. El ambicioso proyecto, que abarca desde el siglo XI hasta principios del siglo XX, consta de un atlas histórico básico, un banco de datos y una enciclopedia electrónica de Madrid.

"Pocas ciudades europeas cuentan con una documentación histórica tan rica como Madrid. Hasta ahora sólo se han descrito los aspectos más anecdóticos de la historia de la ciudad, pero no existe un atlas de esta envergadura, tanto desde el punto de vista metodológico como desde el punto de vista técnico", explica Virgilio Pinto, codirector del proyecto y director del Centro de Documentación para la Historia de Madrid, de la Universidad Autónoma.Un complejo soporte informático, una exhaustiva información gráfica y una metodología social crítica constituyen los elementos distintivos del atlas. "Siempre se habla de Madrid como una ciudad abierta, pero esto no ha impedido que tenga una estructura social muy segregada", comenta Pinto. "La configuración de Madrid a principios del siglo XX es consecuencia de decisiones políticas y de conflictos de clases. Ninguna política de desarrollo urbano es inocente. Vamos a estudiar el crecimiento que ha experimentado la ciudad, sus ejes y su efecto de marginación o integración en la gente de Madrid".

El proyecto, con un coste aproximado de 80 millones de pesetas, consta de tres fases, y es cofinanciado por la Comunidad de Madrid, Fundación Cajamadrid, la Universidad Autónoma y Siemens-Nixdorf. Para finales de 1993 está previsto que concluya la primera etapa: un atlas histórico básico que reconstruirá la evolución de Madrid desde el siglo XI hasta principios del XX.

El crecimiento urbano, la organización del espacio, la sociedad madrileña, las instituciones de control y conformación social o la producción y el consumo serán analizados en esta obra, que constará de unas 450 páginas y cuyo precio quieren que no exceda de las 5.000 pesetas.

Los investigadores del proyecto han concedido gran importancia a los elementos gráficos para que el lector pueda visualizar la historia de Madrid. Las fuentes fundamentales para las reproducciones cartográficas, las pinturas y grabados serán la Biblioteca Nacional y los fondos del Museo Municipal.

Estudiantes y especialistas

Del atlas histórico básico se hará una versión en forma de libro y una segunda en forma de cuadernillos, con material de trabajo para los estudiantes. El banco de datos y la enciclopedia electrónica, objetivos de la segunda y la tercera fase, están destinados a investigadores e instituciones públicas.El banco de datos contendrá referencias bibliográficas y documentales, y reproducción de fuentes y elementos gráficos. La enciclopedia electrónica, a la que se podrá acceder por disco óptico o por ordenador, constará de cuatro partes: la vida material; los grupos sociales, con su cultura, religión y fiestas; los hechos y personajes más destacados, y el patrimonio histórico y cultural.