Los sindicatos aceptan la cogestion del desempleo si el sistema sigue siendo público

La propuesta de reforma del Inem planteada el miércoles por el ministro de Economía, Carlos Solchaga, levantó ayer una fuerte polémica. Los sindicatos se han negado a gestionar un sistema de prestaciones de desempleo que no sea público y varios catedráticos plantean la inconstitucionalidad de la oferta. Hoy, los agentes sociales pedirán a la Administración en la mesa de negociación abierta para la reforma del Inem que perfile más la propuesta. Otras conversaciones, como las de la Ley de Huelga que mantienen los sindicatos con el Grupo Parlamentario Socialista, han experimentado un sustancial avance, así como la puesta en marcha del Consejo Económico y Social.

Los sindicatos sólo aceptarán la cogestión de las prestaciones por desempleo si el sistema sigue siendo enteramente público, una posición unánime hecha pública ayer por los líderes de UGT y CC OO, Nicolás Redondo y Antonio Gutiérrez. Las centrales aseguran que la negociación que mantienen con Trabajo persigue reforzar el Instituto Nacional de Empleo (Inem), no desmantelarlo "como pretende Solchaga". Ambas acusan al ministro de haber actuado con "frivolidad" al presentar su oferta en el debate de Presupuestos ignorando que hay un diálogo en marcha. Para la patronal CEOE, la propuesta de Economía ha sido "una auténtica sorpresa" y hoy pedirá explicaciones a Trabajo en una nueva reunión negociadora sobre la reforma del Inem.El Ministerio de Trabajo calificó ayer el plan de reforma de "propuesta", y matizó que no se llevará adelante si los interlocutores sociales la rechazan. En el mismo sentido se ha manifestado José María Benegas, secretario de organización del PSOE, quien asegura que "habrá que reconsiderar" la oferta si no la aceptan sindicatos y empresarios. El dirigente de la federación de servicios públicos de UGT, José Manuel Quintero, la calificó anoche de "caramelo envenenado", al igual que otros sindicalistas de Comisiones Obreras.

El documento que Trabajo entregó en la mesa negociadora el pasado 20 de julio no incluye esta reforma de las prestaciones y sí expone medidas para agilizar el pago y reconocimiento del seguro de paro sin poner en duda su vínculo con el sistema público de Seguridad Social.

Ese modelo está más cerca del que defienden los sindicatos, que rechazan rotundamente el presentado por el ministro de Economía. "Solchaga ha cogido una vieja propuesta de UGT deformada y corregida con absoluta frivolidad e irresponsabilidad", afirma el dirigente ugetigetista Emilio Castro. Este sindicato sostiene que lo que pidió hace años es participar en la gestión de las prestaciones, pero sin que éstas se desvinculen de la Seguridad Social, mientras que Solchaga propone que dependan de una mutualidad. El modelo de UGT tampoco era apoyado por Comisiones, según Salce Elvira, quien matiza que los sindicatos persiguen "mayor control de la gestión, no la gestión en sí".

Hoy, los dos sindicatos pedirán a la Administración información por escrito sobre la oferta concreta del Gobierno y lo mismo piensa hacer la patronal en la tercera reunión negociadora que se celebra sobre la reforma del Inem entre Administración, empresarios y sindicatos. El ex ministro José Barrionuevo, diputado del Partido Socialista y ponente en la ley de huelga, cree que corresponsabilizar a empresarios y sindicatos en la administración y pago de las prestaciones por desempleo es muy complejo, aunque desea que "se cuente con ellos". Barrionuevo, según dijo, no estaba enterado de la propuesta de reforma del Instituto Nacional de Empleo que Carlos Solchaga presentó durante el debate de Presupuestos el miércoles, aunque aclaró que no sabe si otros compañeros del grupo socialista lo sabían.