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Las siderúrgicas españolas afirman que Francia presionó a la CE contra el plan español

J. R. / P. G. Unesid -organización que agrupa a las empresas siderúrgicas españolas- denunció ayer la presión de las grandes compañías europeas del sector, especialmente la francesa Usinor Sacilor, sobre la decisión del comisario británico Leon Brittan de rechazar el plan español de reestructuración de la siderurgia integral. Su presidente, Juan Ignacio Bartolomé, afirmó que el "plan es el mejor de los planteados", y que será aprobado.

Por su parte el presidente del Gobierno vasco, José Antonio Ardanza, declaró ayer que la puesta en marcha de una miniacería en las instalaciones de Altos Hornos de Vizcaya, AHV, "es innegociable". Ardanza adelantó que en la entrevista celebrada ayer entre el consejero de Industria, Jon Azúa, y su homólogo en la administración central, el ministro Claudio Aranzadi, el representante vasco iba a exigir que el Gobierno defendiera con contundencia el proyecto para AHV ante las instancias europeas.Las reacciones en cadena tras la negativa comunitaria al proyecto español de reforma de la siderurgia prosiguen. Ayer fue una de las organizaciones más, representativas del sector la que alzó la voz contra la decisión de la Dirección General de la Competencia de la CE, que consiste en un mayor recorte de la producción, un aumento de la reducción de empleo y la no construcción de la miniacería de Sestao.

En opinión de Unesid, la postura comunitaria obedece a las presiones efectuadas por las grandes compañías del sector, sobre todo la francesa Usinor Sacilor, y, en menor medida, la británica British Steel y la alemana Thyssen.

El presidente de la organización afirmó que "no se explica de otra manera que se encargue, de forma unilateral, un informe a una consultora próxima a una de esas compañías [British Steel]" y que ese informe "incida precisamente en la gran novedad del plan español, la miniacería de Sestao".

Precios a la baja

El análisis que hacen los expertos de Unesid es el siguiente. El mercado siderúrgico está en plena efervescencia competitiva, con precios muy a la baja, debido a que se ha reducido drásticamente la demanda. Estados Unidos ha restringido fuertemente la entrada de acero, Japón se autoabastece, y los países del Este casi han desaparecido como clientes. Ello ha provocado que las grandes companias europeas opten por abaratar los precios y, como contrapartida, traten de copar nuevos mercados.

En este contexto, un proyecto como el de la Corporación Siderúrgica Integral (CSI) aborta la posible expansión de las grandes hacia España, sobre todo si se logra rentabilizar la miniacería de Sestao, que permite obtener productos muy baratos y competitivos. Y este fenómeno es más acusado y doloso para Francia y para su gigante siderúrgico, Usinor Sacilor. Los alemanes de Thyssen aún pueden extenderse por Centroeuropa y el reducido mercado del Este, mientras los británicos no parecen interesados en entrar con fuerza en el mercado del sur.

Al margen de este razonamiento, Juan Ignacio Bartolomé insiste en que "el plan español es el mejor de los expuestos" y apuesta porque el Consejo de Ministros de Industria le dará vía libre finalmente. Ayer, el Gobierno de Navarra acordó apoyar el plan español. Mientras tanto, la marcha de hierro -organizada precisamente como protesta contra el plan en discusión- cubrió ayer su undécima etapa. Los marchadores que provienen de la vertiente asturiana -trabajadores de Ensidesa- llegaron a la localidad vallisoletana de Medina del Campo. Por su parte, la marcha de los trabajadores de AHV pernoctaron en Aranda de Duero (Burgos).

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