El déficit público alcanza el 2,3% del PIB

El déficit público previsto por la Administración para el próximo ejercicio es del 2,3% del Producto Interior Bruto (PIB). Según se estipula en el proyecto de presupuestos, los gastos superarán a los ingresos en una cifra prevista en torno a 1,421 billones de pesetas.

Los redactores del proyecto de presupuestos reconocen que la crisis económica impide continuar "el proceso de disminución" del déficit iniciado en 1982, cuando representaba el 5,3% del PIB.

El punto culminante de esta contención y reducción progresiva se sitúa en 1989, cuando el déficit quedó reducido al 1,7%. Esta cifra se mantiene dentro de los límites fijados por el Programa de Convergencia como una de las condiciones que deberían cumplir los países miembros de la Comunidad Europea.

Comparando los presupuestos de 1993 con los presentados un año antes, el déficit público se incrementa en un 0,4% en relación con el PIB. Sin embargo, como el déficit real a finales de este año rebasará ampliamente lo presupuestado y se situará según los últimos cálculos en el 2,6%, los responsables del Ministerio de Economía consideran que en realidad este "presupuesto incorpora una reducción en el déficit del 0,3% en relación con el PIB, a pesar de la parte baja del ciclo en que nos encontramos y de los efectos alcistas automáticos que la misma supone para este desequilibrio".

El proceso de crecimiento del déficit, tras el notable descenso experimentado hasta 1989, se interrumpió ya bruscamente al año siguiente con un incremento del 0,6% y se colocó en el 2,3%.

De cumplirse las nuevas previsiones de Carlos Solchaga, el déficit de 1993 nos devolvería a la situación existente, en este campo, tres años antes. Sin embargo, debido al efecto devaluador de la inflación y al crecimiento de la economía, en 1993 ese idéntico porcentaje de déficit suma ahora 250.000 millones de pesetas más que en 1990.