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Las familias monoparentales reclaman el mismo trato que las de dos cónyuges

La Asociación de Familias Monoparentales de Vizcaya, única que abarca este área social en toda España y que está compuesta por 130 mujeres quiere extender la experiencia a otras regiones. Su fundadora y presidenta, Rosa de la Fuente, de 30 años y con una hija de siete, explica que sus principales reivindicaciones persiguen el reconocimiento como familias y la creación de políticas que garanticen servicios sociales para las mujeres. En este país, "si eres progenitora sola estás abocada a la pobreza y a la marginación", afirma.

"Familias monoparentales", puntualiza la presidenta de la asociación, "son aquellas formadas por cualquier progenitora o progenitor solo, física o psicológicamente, con hijos-as a su cargo". Un amplio espectro en el que caben madres o padres solteros, separados, viudos, o cualquier otra situación, como mujeres de presos o madres adoptivas. El estado civil queda al margen.Según la asociación de Bilbao, compuesta sólo por mujeres, falta presión en la sociedad española para que se cumplan las leyes y planes favorables a las mujeres y a la familia. En este sentido, la asociación quiere mediar entre las mujeres, en su mayoría carentes de recursos, y los responsables de la creación y dotación de servicios.

Rosa de la Fuente dice estar harta de las críticas y de la hipocresía de la sociedad, y pregunta: "¿Por qué se le juzga a una madre soltera con cuatro hijos y no a una casada con un hijo? De lo que se trata es de hijos deseados". Rosa fundó en noviembre de 1991 la Asociación de Familias Monoparentales de Vizcaya, a partir de modelos de asociaciones europeas. Tras 10 meses de funcionamiento, pretenden crear una red estatal de asociaciones monoparentales.

Feminización de la pobreza

Euskadi es la región que registra el crecimiento vegetativo más bajo de Europa y cuenta con un alto porcentaje de embarazos en adolescentes, dato extensible al resto del Estado. Un estudio del CSIC de marzo de este año mostraba cómo de 1975 a 1987 aumentó ininterrumpidamente a nivel estatal el número de embarazos en menores de 20 años. Rosa comenta: "Dentro de las familias monoparentales en el escalafón más bajo, están las madres solteras, y dentro de éstas, las madres adolescentes".

El aumento del número de mujeres solas con hijos a su cargo ha acuñado el término "feminización de la pobreza", que Emakunde (Instituto Vasco de la Mujer) incorpora como un fenómeno social a paliar de aquí a 1994. El plan prevé una serie de acciones específicas en las que se da prioridad a la concesión de ayudas a las mujeres solas con hijos, tanto para vivienda como para cursos de formación y acceso al empleo.

Después de un año desde la aprobación del plan por el Gobierno vasco, las responsables de Emakunde, cuya función es "forzar a los Ayuntamientos e instituciones públicas para que creen servicios para la mujer", se encuentran satisfechas con los resultados obtenidos. Aunque reconocen que todavía hay mucho por hacer, afirman que "se está logrando un grado importante de concienciación en las instituciones públicas".

Las mujeres de la asociación se muestran bastante menos optimistas respecto a las subvenciones, y afirman que son innumerables las trabas con las que se encuentran para acceder a una subvención. "Sufrimos especialmente la falta de servicios y de apoyo a la infancia", dice la presidenta. "La situación de la mujer sola con hijos se agrava por el rechazo social que existe. La hipocresía de la sociedad es increíble. Ser madre soltera o separada es una circunstancia, no una patología o una desviación", añade. La asociación está integrada en su mayoría por madres solteras o separadas con una situación económica desfavorable. Sólo una de cada tres ha conseguido alguna subvención. "En el papel todo es muy positivo pero yo veo la realidad y la verdad es que la carencia de servicios es enorme", dice De la Fuente.

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