El SPD alemán da marcha atrás en la reforma del derecho de asilo

Los sucesos de Rostock y la continuación de la violencia racista, que ayer se reprodujo en varios lugares de la antigua Alemania comunista, han provocado duros enfrentamientos entre el poder y la oposición socialdemócrata. Ambos se acusan del deterioro de la situación. El SPD, sin embargo, que parecía dispuesto a aceptar una reforma constitucional del derecho de asilo, ha dado ahora marcha atrás, aplazando el asunto hasta su Congreso extraordinario, previsto para el 30 de este mes en Bonn.

El SPD acusa al Gobierno de Helmut Kohl de permitir deliberadamente el deterioro del problema de la inmigración para conseguir así que una posterior presión de la opinión pública le permitiera acometer una reforma radical, reduciendo el actual sistema de derecho de asilo.

[El ministro del Interior, el democristiano Rudolf Seiters, aseguró ayer en Barcelona que la llegada de inmigrantes y el alza del desempleo no pueden justificar los "vergonzosos" actos xenófobos, según Europa Press]

Las últimas estadísticas demuestran que la inmigración no deja de crecer. La última arroja, una cifra récord de 273.942 asylanten (asilados) llegados a Alemania en lo que va de año, lo que supone un espectacular aumento del 94% con respecto al mismo periodo de 1991. Sólo en agosto, 40.000 personas pidieron asilo político en Alemania. Todos ellos tienen derecho a ser alojados y alimentados por las Administraciones locales y regionales en tanto se resuelve su expediente.