Mal de muchos
Sólo Alemania y Portugal se salvan de la crisis de la construcción en la CE
Los últimos datos de coyuntura de la economía española coinciden, al margen de dar la voz de alarma general, en advertir que uno de sus motores principales, la construcción, comienza a fallar peligrosamente. No obstante, esta avería no es exclusiva de España. Si ya el ano pasado la construcción en el conjunto de la CE experimentó un decrecimiento de tres décimas, las previsiones para éste rondan el punto. España, el Reino Unido y los Países Bajos serán los que más noten la crisis. Tan sólo Alemania y Portugal lograrán cerrar 1992 con un signo positivo en su casilla de crecimiento, según todos los pronósticos.
Hace escasamente 10 días, el Instituto Nacional de Empleo (Inem) anunciaba una notable reducción del paro registrado en España en el mes de julio. El número de desempleados descendía en todos los sectores, con una única excepción: la construcción.El pasado jueves, el Banco de España dibujaba un panorama bastante sombrío para la economía española y hacia un énfasis muy especial en el sector constructor. "Los datos disponibles sobre la inversión en construcción confirman su desaceleración durante el segundo trimestre, lo que condiciona no sólo la actividad del sector, sino también la de numerosos sectores estrechamente relacionados con él", señalaba el banco emisor. "Los indicadores de gasto en construcción", añadía el informe, "no permiten esperar, por el momento, un cambio significativo de la senda de contínua desaceleración que sigue este componente de la formación bruta de capital fijo [inversión]". La licitación oficial, después de reducirse en 1991 un 27,8%, en términos nominales, acumuló un descenso del 47,9% en los seis primeros meses del año.
Distintas situaciones
Este panorama desalentador no es exclusivo del sector constructor español. En 1991 la actividad en el conjunto de la CE sufrió una caída de tres décimas que ponía fin al periodo dorado 1986-1990. Y ese descenso no va a ser pasajero. Todas las previsiones apuntan a un decrecimiento próximo al punto para 1992, tal y como señalan los estudios realizados por la Federación Internacional de Empresas de la Construcción (FIEC) y la organización independiente Euro Construct.
Este deterioro se ha manifestado de manera muy dispar en cada país durante los últimos tres años:
-Alemania: Es, junto a Portugal, el único país en el que se espera un crecimiento positivo para este año. Durante los últimos tres ha mantenido un alza de entre cuatro y cinco puntos, cifra que se verá rebajada a la mitad en 1992. El motor de la actividad será la Alemania del Este. En sus lander el empleo ha crecido de una forma notable.
-ltalia: La actividad constructora italiana ha seguido una leve pero continua pendiente. En 1989 experimentó un alza del 4%, que fue del 2,4% en 1990 y del 1,2% el año anterior. Para este ejercicio, todo apunta a un descenso de cuatro décimas.
-Reino Unido: El conjunto de la construcción ha sufrido, junto a la danesa, antes que el resto la crisis. Ya el año pasado experimentó un decrecimiento de casi nueve puntos, que se suavizará en 1992, a pesar de las enormes dificultades por las que atraviesa el sector inmobiliario y que se han manifestado en la supensión de pagos del Grupo Mountleigh o en la quiebra de la filial británica de Olimpia & York.
-Francia: El caso francés es muy similar al italiano. Su suave caída se ha debido, principalmente, al mantenimiento de las obras públicas, sobre todo en lo referente a la rehabilitación y el mantenimiento.
-Países Bajos: Los estudios apuntan a que experimentará el descenso más acusado durante este ejercicio, un 5,7%, tras tres años de acusada contención.
-Bélgica: El parón de las inversiones destinadas a vivienda nueva justifican su cambio de tendencia, que se traducirá este año en un descenso de la actividad en más de medio punto.
-Portugal: Mantiene casi inalterable su tasa de crecimiento desde 1989. El buen momento por el que atraviesa la economía y la necesidad de poner a punto sus infraestructuras son los acicates para el sector constructor.
-Dinamarca: No ha logrado levantar cabeza desde el final de la pasada década. A pesar de estar casi bajo mínimos, todo indica que este año tampoco logrará incrementar su producción.
-Irlanda: Con una trayectoria similar a la española, en los dos últimos ejercicios parece haberse contagiado del Reino Unido. Los expertos predicen para 1992 un nuevo descenso, en este caso de algo más de dos puntos.
Los informes sobre la evolución de la construcción en la Comunidad Europea señalan como causas de la crisis tres aspectos: los problemas de la economía mundial, los altos tipos de interés, y el hecho de que las empresas constructoras se hayan centrado, en muchas ocasiones, en procesos meramente especulativos.
España sufre el desplome mas llamativo
España ha protagonizado el desplome más llamativo de la CE. El boom de la construcción provocó un espectacular crecimiento del 13% en 1989, el más alto de la Comunidad aquel año. El 9% de incremento en 1990 tan sólo fue superado por Irlanda con el 10,8%, aunque ésta tenga un volumen de negocio muy inferior. Las previsiones para éste año son muy negativas.SEOPAN -organización que engloba a las principales empresas del sector- pronosticó a principio de año una caída de uno o dos puntos. Este cálculo ya se ha reducido hasta el 4%, "y todavía puede retocarse a la baja", dice.
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