George Bush rechaza las acusaciones de adulterio
El presidente norteamericano, George Bush, reaccionó airado ante la información que publicaba ayer el periódico The New York Post en la que se daban detalles sobre su presunta relación sentimental con una de sus asesoras. "No tengo nada que decir al respecto excepto que es mentira" dijo enfadado el político de 68 años que fundamenta su campaña electoral en la recuperación de los valores morales de los norteamericanos.
El diario sensacionalista dedicaba cuatro páginas de su edición de ayer a una información titulada El 'affair' de Bush en la que se daban detalles sobre sus encuentros con Jernnifer Fitzgerald, que colabora con el presidente norteamericano desde diversos cargos de confianza desde 1974. La jefa de campaña de Bush, Mary Matalin, acusó ayer a los demócratas de haber instrumentalízado la filtración como parte de su juego electoral "sucio, negativo y rastrero".La información del New York Post se fundamenta en las declaraciones del embajadornorteamericano, Louis Field, que se recogen en un libro escrito por una periodista casada con un ex colaborador de la cadena CNN. Según la obra de Susan Trenton, el embajador, que ya ha fallecido, le confesó a su marido que él mismo organizó el encuentro solitario de Bush y Fitzgerald en una casa cedida por el Aga Ján durante su estancia en Ginebra en 1984. La periodista ha asegurado que tiene pruebas grabadas de las declaraciones del embajador en las que éste se mostraba avergonzado por su intervención en los hechos.
Hasta la publicación del diario ningún medio de comunicación norteamericano había hablado tan explícitamente de la supuesta relación extramatrimonial de Bush.
