Oliver Stone proyecta rodar 'Homenaje a Cataluña', con David Bowie

El cineasta estadounidense Oliver Stone está dispuesto a pasar de la guerra de¡ Vietnam a la guerra civil española. A propuesta del cantante y actor británico David Bowie, quiere llevar al cine Homenaje a Cataluña, la obra del también británico George Orwell, emotiva y autobiográfica crónica antifascista sobre la contienda española. Antes de iniciar el proyecto, el creador de Platoon volverá a su guerra hasta ahora habitual, con Cielo y tierra, una película que el propio Stone define como "Lo que el viento se llevó, pero en estilo vietnamita". Estas revelaciones las hizo ayer el cineasta en los cursos de verano de la Complutense, donde recibió la medalla de oro de la universidad. El año pasado fue galardonado Bertolucci.

Oliver Stone permanecerá en España menos de 24 horas -llegó de París a media tarde y esta mañana regreasará a la capital francesa-, pero tuvo tiempo de dar una auténtica lección sobre el coraje, compromiso, independencia y función social que pueden cumplir los cineastas de hoy. Estas cualidades fueron resaltadas por Fernando Lara y José Vidal Beneyto a la hora de entregar al autor de Platoon y JFK la medalla de oro de la Complutense.Vestido con traje negro y camisa blanca, empapado de sudor,y hablando con un recio estilo marine -participó en ese cuerpo militar en la guerra de Vietnam-, Stone dio su visión del cine: "Siempre me han acusado de que hago películas sobre temas conflictivos, en lugar de comedias. Pero siempre he recorrido mi propio camino, ocupo una posición muy especial y tengo el compromiso con migo mismo de hacer películas realistas, porque la historia oficial norteamericana se ha con vertido en una nada. Los ciudadanos de mi país no saben lo que pasó en Vietnam o con el Watergate, por ejemplo. Hay más transparencia en Alemania del Este o en Rusia que en Estados Unidos. En mis películas, intento sacar las sombras de esa nada a través de historias de ficción".

Orwell

El proyecto de llevar al cine la guerra civil española a través de la adaptación del libro autobiográfico de George Orwell Homenaje a Cataluña le ha llegado a Stone de manos del ídolo de la canción y también actor David Bowie. Este encarnaría en la película al propio escritor. Oliver Stone explicó ayer que todavía no está cerrado el proyecto y que es consciente de sus propias dificultades y limitaciones para hablar de una guerra, la española, que no vivió directamente. Pero aseguró: "Creo que es un buen momento para rodarla ahora, porque aún quedan algunos supervivientes de aquella época".

Con nueve películas en su haber como director, 46 años de edad, y un compromiso nítido con los derechos humanos, el cineasta afirma que ha dado todo su apoyo a la candidatura demócrata de Bill Clinton, porque le "recuerda a Kennedy". Justamente la última película de Stone es JFK, que levantó enorme polémica en Estados Unidos al plantear la responsabilidad de la CIA en el asesinato en Dallas del presidente. "Cuando empecé a filmar JFK", dijo Stone, "estuve asustado y con miedo de que me mataran. Pero, cuando acabé la película, me di cuenta de que la CIA no iba a intentar matarme, sino que buscaría destruirme a través de los medios de comunicación. El único motivo por el que estoy aquí es porque el público de Estados Unidos y del resto del mundo ha respondido a la película. Por eso he sobrevivido".

Antes de Homenaje a Cataluña, Oliver Stone va a rodar Cielo y tierra, una nueva incursión en la guerra de Vietnam. Precisamente está en París estos días en busca de financiación europea para la película -de momento cuenta ya con el apoyo de Canal Plus de Francia, que ya participó en JFK-, porque dice sentir que cada vez tiene mayores presiones económicas en su país.

Quiere rodar en septiembre y que la historia está basada en hechos reales: la autobiografía de una campesina vietnamita que trabajó con el Vietcong y los americanos, tuvo tres maridos, fue prostituta y acabó como ama de casa en Estados Unidos. "Es fascinante", dijo Stone, "porque voy a dar el punto de vista del otro lado de la guerra del Vietnam, es decir de los vietnamitas".

Oliver Stone da una curiosa e irreverente definición sobre lo que para él es una película: "Es una fantasía íntima y, al mismo tiempo, un orgasmo público".