Gobierno, sindicatos y patronal tienen dificultades para pactar el presidente del Consejo Económico

El Gobierno tiene dificultades para presentar a los interlocutores sociales una terna de candidatos para presidente del Consejo Económico y Social (CES) que no sea rechazada automáticamente. En los contactos mantenidos en los últimos días todavía no se han concretado nombres ni fechas para que empiece a funcionar el consejo. Tan sólo hay un principio de acuerdo en que se trate de una persona "con talante negociador" y el candidato que menos rechazo inspira es José Barrionuevo, barajado junto a otros ex ministros socialistas y los catedráticos Federico Durán y José Vida Soria.

El ministro de Trabajo, Luis Martínez Noval, se ha comprometido con los sindicatos a que el futuro presidente del CES sea 11 una persona integradora". UGT y CC OO, a su vez, han pedido que tenga "una trayectoria no beligerante con los sindicatos". Esos requisitos limitan los candidatos con posibilidades de conseguir el apoyo preceptivo de dos tercios de los 60 miembros del consejo. El consenso previo es en consecuencia necesario, aunque formalmente el nombre lo presenta el Gobierno, a propuesta de los ministros de Economía y Trabajo.En los contactos mantenidos en los últimos días ni siquiera se ha precisado si se busca a un político -propuesta del Gobierno y la UGT, aunque no coinciden en las personas- o un catedrático sin vinculaciones políticas -lo defienden CC 00 y la CEOE-.

José Barrionuevo, ex ministro de Interior y de Transportes e inspector de Trabajo, es uno de los candidatos con más posibilidades para presidir el CES por las buenas relaciones que mantiene con los máximos dirigentes de UGT. Ni la patronal CEOE ni CC OO pondrían demasiados reparos para apoyarle. Barrionuevo despierta menos reticencias que otros ex ministros sondeados, entre ellos Joaquín Almunia, quien cuenta con un rechazo frontal de la dirección de UGT y con pocas simpatías en CC OO.

La otra hipótesis barajada consiste en proponer un catedrático de Trabajo o Economía. Federico Durán, presidente de la Comisión Nacional Consultiva de Convenios Colectivos y catedrático del Derecho del Trabajo, es un nombre prácticamente seguro en la terna del Gobierno. A los sindicatos no les convence porque lo consideran "inspirador" del borrador de la ley de huelga.

Seis expertos

El candidato puede salir también de la lista de seis expertos de reconocido prestigio en relaciones laborales que deben formar parte del CES. Reúnen todos los requisitos los catedráticos José Vida Soria, Luis Enrique de la Villa, Juan Antonio Sagardoy, Luis Toharia, Tomás Sala y María Emilla Casas. Ha quedado descartado Miguel Rodríguez Piñero, tras ser elegido presidente del Tribunal Constitucional.

Pese a esas dificultades, Gobierno, patronal y sindicatos están dispuestos a que el CES sea, por fin, una realidad a partir del próximo otoño. No quieren retrasar aún más la constitución del consejo que se creó Por ley en mayo de 1991 y que se debía haber formalizado en noviembre del pasado año.

Los retrasos se han ido sucediendo porque el Gobierno pedía a los sindicatos su lista de representantes y las centrales, a su vez, requerían conocer primero el perfil del presidente y su talante negociador. El bloqueo todavía no se ha superado y una prueba es que ni UGT ni CC OO han presentado la lista de sus representantes. Lo que si sabe CC 00 es que en su delegación habrá dos o tres miembros de la dirección y responsables de las áreas técnicas de protección social, economía, empleo y política social. La patronal presentó su lista hace meses al Gobierno -estáencabezada por Juan Jiménez Aguilar y Fabián Márquez-, y también lo hicieron las organizaciones de agricultores, pescadores, cooperativas y consumidores.

Estos colectivos -con 14 representantes- forman el tercer grupo del CES, un órgano consultivo del Gobierno donde deben estar también representados los sindicatos con 20 miembros y la patronal con otros 20, junto a un grupo de seis expertos en relaciones laborales.

En la sede del CES, está todo preparado para empezar a trabajar. El futuro consejo cuenta con un presupuesto aprobado desde 1991 de 700 millones de pesetas.