Bush promete a Salinas que no habrá más secuestros en el extranjero

El presidente de Estados Unidos, George Bush, anunció el, martes en San Diego (California) que por parte de Estados Unidos no existe intención de repetir secuestros de prófugos fuera de sus fronteras, en alusión al caso Álvarez Machaín, y reconoció "la preocupación y el sufrimiento" con que el pueblo mexicano recibió la reciente decisión de la justicia de EE UU de no respetar otras soberanías cuando se trata de la lucha contra, el narcotráfico.

Bush pronunció estas palabras junto a su homólogo mexicano, Carlos Salinas de Gortari, con quien celebró una reunión de trabajo de casi una hora en la misión de Alcalá, en San Diego.Salinas había sido muy enérgico momentos antes cuando, delante de los periodistas, calificó de "inválida e inaceptable" la sentencia del Tribunal Supremo estadounidense que concibió recientemente como legal el secuestro del médico mexicano Humberto Álvárez Machaín, efectuado por cazarrecompensas contratados por la agencia antinarcóticos (DEA).

Salinas reiteró que México será inflexible con quienes violen la ley, actualizada para impedir actividades de policías extranjeros dentro del territorio nacional siempre que no sean informativas, y aprovechó también el encuentro para exigir la devolución del médico, preso en EE UU.

La cumbre Bush-Salinas, exceptuando, este espinoso tema que el mandatario mexicano indicó que fue tratado de forma "franca, directa y respetuosa", giró en tomo al Tratado de Libre Comercio (TLC), que ambos países y Canadá pretenden sellar en breve. La alianza, en dificultades en su recta final, será aprobada antes de noviembre y se fijó el próximo 25 como el día D del comienzo de la última etapa negociadora. Ambos presidentes, terminado su encuentro, telefonearon al primer ministro de Canadá, Brian Mulroney, para darle cuenta del compromiso alcanzado.

Apurar la negociación

La reunión del día 25 convocará a los ministros de Comercio de los tres países, y tiene por objetivo apurar la negociación para que el TLC pueda ser entregado al Congreso norteamericano antes del 2 de octubre, día en que concluye el período de sesiones ante la proximidad de las elecciones presidenciales, a celebrar el 3 de noviembre.Bush, preguntado por los periodistas, dijo que el TLC está al margen del proceso electoraI que vive su, país y segregó de él cualquier intencionalidad política.

El presidente mexicano advirtió a Bush que en la próxima reunión bilateral, en otoño, su Gobierno promoverá un cambio sustantivo del tratado de extradición con Estados Unidos, que data de 1978, para que la justicia norteamericana no pueda alegar que en él no se prohíben los secuestros.

En el séquito de Salinas viajaban los gobernadores de Sonora y Baja California Norte, el priista Manlio Favio Beltrones y el panista Emesto Ruffo. La presencia de este último presentaba a Salinas como un presidente que se entiende con la oposición después de unas elecciones (Michoacán y Chihuahua) en que tanto el PRI como el PAN se han repartido los gobiernos en litigio, en detrimento de la izquierda radical que representa Cuauhtémoc Cárdenas, que se quedó sola en su estrategia de lucha contra el fraude.