Pujol reformará su Gobierno y creará un 'ministerio' de Asuntos Europeos

La elección de Jordi Pujol como presidente de la Asamblea de las Regiones de Europa (ARE) hará irremediablemente más amplia la reorganización M Gobierno catalán, que el responsable del Ejecutivo autónomo tiene intención de anunciar, a lo más tardar, tras el verano. Después de la reunión regional de Santiago, de Compostela, Pujol ya tiene boca arriba todas las piezas del rompecabezas que necesitaba para concretar la reestructuración de su Gabinete, en el que creará un ministerio de Asuntos Europeos.

Es casi seguro que el consejero de Agricultura, Joan Vallvé, deje este cargo y se responsabilice de los temas relacionados con la ARE. De confirmarse esta alternativa, Pujol tendrá que cubrir un mínimo de tres agujeros en el Gobierno catalán, ya que la marcha de los consejeros de Educación, Josep Laporte, y de Justicia, Agustí Bassols, está cantada desde hace meses.Joan Vallvé ya actuó en Santiago, donde Pujol fue elegido presidente de la ARE tras infligir una severa derrota a Manuel Fraga, como el más estrecho colaborador del jefe del Ejecutivo catalán. En la capital gallega, Vallvé coordinó el equipo de Presidencia ocupando un puesto impropio de un consejero de Agricultura. Pujol admitió implícitamente el viernes que, desde ahora, necesitará potenciar en su equipo la coordinación de los asuntos relacionados con la ARE situando, en buena lógica, al frente a un responsable político.

El sustituto

Pujol quiere que sea Vallvé quien haga este trabajo, le acompañe en sus viajes al extranjero y le reemplace cuando sus obligaciones en Cataluña le impidan estar presente en los foros internacionales a los que deberá acudir en su doble condición de presidente de la Generalitat y de la ARE. La abrumadora victoria de Pujol frente a Fraga se consiguió en buena parte gracias al carisma del político catalán y pese a la deficiente estructura actualmente existente en el gabinete de Presidencia del político catalán.

La cuestión no resuelta por Pujol es si la coordinación de sus actuaciones internacionales debe hacerse creando una consejería específica, opción que le resulta especialmente complicada. Vallvé es miembro del Gobierno desde diciembre de 1989, está considerado como un comodín y recientemente superó con nota un complicado debate sobre la política agraria de la Generalitat. El problema radica en que Pujol no desea bajo ningún concepto que la solución final que adopte pueda ser interpretada como un retroceso en la carrera política del consejero de Agricultura, cuando es todo lo contrario.

Una hipótesis que Pujol ha insinuado sería nombrar a Joan Vallvé secretario general de Presidencia para Asuntos Europeos, desgajando todo este ámbito del secretario general de la Presidencia, Joaquim Pujol. En la práctica, este último no ha ejercido nunca control sobre este área aunque formalmente la tenga adscrita por una herencia mecánica de su antecesor en el cargo, Lluís Prenafeta. Por ese motivo ni siquiera acompañó al presidente de la Generalitat a Galicia.

[Manuel Fraga, al ser preguntado ayer en León sobre el resultado de la ARE, interrumpió en tono brusco: "Yo no hablo de política, pregúnteme sobre cosas serias", informa ].