Solchaga cree que los sindicatos ya han decidido la huelga general para octubre

El ministro de Economía, Carlos Solchaga, se mostró convencido ante el comité federal del PSOE, reunido en Madrid el viernes y el sábado pasados, de que los sindicatos no van a cambiar su actitud beligerante con el Gobierno, e incluso aseguró que ya tienen decidido "convocar una huelga general para octubre". El presidente del Gobierno, Felipe González, sostuvo ante los demás dirigentes de su partido que, la consecución de un acuerdo con los sindicatos es conveniente, pero no imprescindible.

Solchaga expresó de forma inequívoca su opinión, según varios asistentes al debate, en la respuesta a una intervención del sindicalista Julián Ariza y a otra de Antonio García Santesmases, portavoz de Izquierda Socialista. Con anterioridad, Felipe González se había preguntado en voz alta si es conveniente un acuerdo con los sindicatos, y respondió afirmativamente. A continuación, se interrogó si es "imprescindible" ese acuerdo, y la respuesta fue que "no".Según varios participantes en la reunión del Comité Federal, no hubo contradicción alguna entre el discurso económico de Carlos Solchaga y el del presidente del Gobierno. El ministro contestó a Antonio García Santesmases cuando en tono de humor éste último pidió un "descanso" para el titular de Economía dado que su esfuerzo en los últimos años debía ser recompensado con un relevo. El ministro respondió que "allí donde se juzga la política económica que hace el, Gobierno de España se le da buena nota y se la califica de rigurosa, por lo que con éstas u otras caras se hará la misma política", aseguran que dijo Solchaga.

Aunque Solchaga y González evitaron hablar de "sacrificios" para la próxima etapa, el presidente del Gobierno sí afirmó en un determinado momento que "vamos hacia un periodo de pocas alegrías presupuestarias". Esta idea fue igualmente expuesta por Carlos Solchaga ante algunos miembros del Comité Federal en un momento de descanso de la reunión del sábado.

El reciente debate del Comité Federal del PSOE entre congresos puso de manifiesto una división interna respecto a la política a seguir con los sindicatos. Esta diferencia de criterios se observa incluso entre sectores homogéneos. Así, mientras el vicesecretario general, Alfonso Guerra, intenta un acercamiento con las centrales sindicales, destacados guerristas dan esa relación por acabada, en coincidencia con el ministro de Economía, Carlos Solchaga, y con el presidente del Gobierno, Felipe González.

El sector renovador deja muy en segundo término en su discurso el acercamiento sindical, en tanto el ministro de Educación, Javier Solana, perteneciente a esa sensibilidad, ha mantenido reuniones secretas con sindicalistas. Izquierda Socialista es el único grupo del PSOE que mantiene relaciones fluidas con la dirección de UGT.

Los máximos dirigentes de la Unión General de Trabajadores se han mostrado más que escépticos respecto a los intentos de acercamiento de dirigentes del PSOE, según han manifestado esta misma semana a personas de ese partido con quien tienen relaciones habituales. Las dudas de UGT respecto a formalizar un diálogo con el PSOE vienen dadas por planteamientos de utilidad al no ver con nitidez qué pueden ganar con ello.