Los sindicatos de los países de la OCDE han perdido cinco millones de afiliados

Un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) señala que la representatividad sindical ha experimentado una tendencia a la disminución de afiliados en el conjunto de países de la OCDE, que perdieron durante la década de los ochenta cinco millones de miembros de los sindicatos. El aumento del desempleo y la generalización del trabajo temporal y parcial están agudizando la pobreza y la desigualdad en el mundo.

Si la afiliación sindical bajó del 37% en 1975 al 28% en 1988, en la actualidad se observan signos de estabilización, según el informe del organismo internacional. España cuenta con el índice más bajo de afiliación, el 16%, detrás de Francia que cuenta con el 12%. Aunque en ambos países su influencia se refleja en los convenios colectivos negociados que afectan al 82% y al 80% de los trabajadores, respectivamente.Ante la recesión económica persistente, la OIT prevé que se originarán tasas de desempleo superiores al 7,4% en 1992, situándose en torno al 7,1% en 1991, de promedio global en los países de la OCDE. Mientras que los sucesos en Europa del Este y la situación de desempleo, persistente plantean la posibilidad de la mayor oleada de emigraciones en Europa desde la II Guerra Mundial, estimándose en 20 millones el número de emigrantes potenciales dispuestos a abandonar Europa oriental.

Según el informe sobre la situación laboral en el mundo presentado por la OIT en la 79ª Conferencia Internacional del Trabajo, el número de pobres que afectaba en Europa al 12% de la población en 1975, pasó a ser del 18% en 1989 y se estima a más del 20% en la actualidad, llegando al punto de afectar en países como Suiza al 10% de la población que tienen ingresos inferiores a los mínimos vitales. Mientras que en Estados Unidos se estimaba en 1989 un 13% de la población, es decir, 38 millones de personas viviendo en la Pobreza.

Ingresos medios

En la CE la categoría de pobres que aumenta más deprisa es la de los desempleados. Confirmando que en 1989 había en Europa 44 millones de personas que percibían menos de la mitad de los ingresos medios de su país. Mientras en Inglaterra y en España se prevé para el final del decenio que la contratación eventual alcance e incluso supere el 40%. La OIT señala que de 1980 a 1990 más del 50% de las contrataciones fueron temporales en Alemania, España, Francia, Luxemburgo y Holanda.La situación calificada de poco alentadora por la persistente recesión en numerosos países industrializados, la desestabilización económica de los países de Europa oriental y la crisis endémica de los países africanos completan el sombrío panorama de la situación económica en el mundo.

En cuanto a los países de la OCDE, Australia, Canadá, Estados Unidos, Finlandia, Irlanda, Nueva Zelanda, Reino Unido y Suecia han registrado aumentos considerables de las tasas de paro. Siendo Alemania (occidental), Bélgica, España, Noruega, Holanda y Portugal los que mantienen los niveles actuales o los mejoran levemente. Las previsiones apuntan a un promedio superior al 7,4% de desempleo en los países de la OCDE, que ya cuentan con 28 millones de parados. España, con unas tasas del 15,9% en 1991 sigue siendo el país con mayor número de parados después de Irlanda, con 16,5%. Las previsiones para 1992 en España apuntan a una mejora de las tasas de desempleo: 15,2%. Mientras se señala que el aumento de la población activa hasta el final del decenio será del 0,7% anual.