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El golpe a la nueva dirección de ETA obliga a la banda terrorista a recomponer su cúpula

Aurora Intxausti

El golpe a la dirección de ETA asestado, el pasado domingo en la operación policial llevada a cabo en Francia -segundo tras su anterior desmantelamiento el pasado 29 de marzo en la localidad de Bidart- ha vuelto a abrir la problemática cuestión de la sucesión en la cúpula etarra. La policía española investiga, mientras tanto, la supuesta conexión de uno de los detenidos, Bernardo Mella Durán, de origen chileno, con el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR). Mella fue detenido junto a los nuevos presuntos dirigentes de la banda terrorista, Iñaki Bilbao y Rosario Picabea.

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La cita se convirtió en una trampa

La Audiencia Nacional ya revisa los sumarios en los que se ven incursos ambos activistas para reclamar su extradición.La operación contra ETA llevada a cabo el pasado domingo en el suroeste francés se saldó con la detención de los presuntos dirigentes de esa organización Iñaki Bilbao Beascoetxea, Iñaki Lemona, y Rosario Picabea Ugalde, Errota, y sus colaboradores Bernardo Mella Durán, de origen chileno, -al parecer chófer y guardaespaldas de Bilbao- y Bernadette Aguerretche. La documentación incautada y las declaraciones de las etarras permitieron el registro de varios domicilios en distintas localidades francesas.

El arresto de los dos etarras ha abortado, según expertos en la lucha antiterrorista, la formación de una nueva cúpula dirigente y la recomposición de la infraestructura de ese grupo. Esos mismos medios apuntan que la organización podría encontrarse en estos momentos en manos de elementos del brazo político de ETA, como Faustino Estanislao Villanueva, Txapu; Felipe San Epifanio, Pipe, y Julián Atxurra Segurola, Pototo. Los detenidos fueron interrogados ayer por la policía francesa.

La reunión que tenían previsto celebrar Iñaki Bilbao y Rosario Picabea en el aparcamiento del Hospital Saint Leon de Bayona fue interrumpida a las 15.30 horas del domingo por agentes de los servicios de información franceses.

El vehículo en el que estaban Bilbao y Picabea -ambos portaban pistolas que no llegaron a usar- fue rodeado por varios policías. A escasos metros de los anteriores fueron arrestados Bernardo Mella y Bernadette Aguirretche cuando se disponían a acercarse al coche.

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Comandos y explosivos

Según fuentes policiales, mientras Bilbao se ocupaba actualmente de la dirección de los comandos, Rosario Picabea se encargaba de los explosivos y del paso de activistas por la frontera. Iñaki Bilbao, natural de Lemona (Vizcaya), de 32 años de edad, entró a formar de ETA en la década de los 80. Durante cuatro años fue uno de los integrantes del comando Gohierri Costa, desarticulado por la Guardia Civil en 1986, año en el que el etarra huyó a Francia. Rosario Picabea Ugalde, Errota, es natural de Hernani (Guipúzcoa) y responsable de explosivos, puesto que hasta hace dos meses ocupaba Joseba Arregui Erostarbe, Fitti, detenido junto a Pakito.

Bernardo Mella Durán, chileno nacionalizado francés, podría actuar de enlace entre esta nueva dirección y comandos, según fuentes de la lucha antiterrorista española. Estos medios indicaron que se investiga la posible conexión, de Mella con el MIR (Movimiento de Izquierda Revolucionaria), informa Francisco Mercado.

En la operación no fue detenido Félix Alberto López la Calle, Mobutu, en contra de lo informado ayer, confusión originada al ser el ex marido de Aguerretxe.

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Sobre la firma

Aurora Intxausti
Coordina la sección de Cultura de Madrid y escribe en EL PAÍS desde 1985. Cree que es difícil encontrar una ciudad más bonita que San Sebastián.

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