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Estados Unidos y los Doce aplican nuevas medidas de presión contra Serbia

Estados Unidos, la Comunidad Europea (CE) y el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aplicaron ayer nuevas medidas de presión sobre Belgrado, al que consideran principal responsable de la guerra que se viene librando desde hace casi un año en los Balcanes. Al mismo tiempo, según la agencia Tanjug, el Ejército serbio-federal llegó a un acuerdo ayer con las autoridades de Bosnia-Herzegovina para evacuar a partir de hoy sus cuatro cuarteles bloqueados en Sarajevo.

Dentro de las medidas de presión adoptadas por la comunidad internacional contra Belgrado, Washington va a expulsar a agregados militares serbios y a cerrar consulados; la Comunidad Europea (CE) va a aplicar nuevas sanciones a Serbia; y la ONU ha advertido al Gobierno de Slobodan Milosevic que se abstenga de realizar cualquier acción que ponga en peligro el despliegue de los cascos azules en la Eslavonia Oriental, entre las fuerzas serbias y crotas.La Administración de George Bush manifestó ayer estar "consternada" con la conducta que vienen manteniendo los responsables serbios en esta crisis. Como consecuencia, y con el propósito de presionar para una retirada serbia de Bosnia, Washington informó ayer a la CE que iba a expulsar inmediatamente a los agregados militares serbios en Washington y a cerrar dos consulados yugoslavos en EE UU. El secretario de Estado norteamericano, James Baker, se refirió ayer a la posiblidad de una acción militar contra Serbia en caso de que fracasen los otros medios de presión.

La decisión estadounidense coincidió con una seria advertencia del Consejo de Seguridad a Belgrado de que debe tomar medidas urgentes para garantizar la cooperación de las autoridades locales bajo su jurisdicción con las fuerzas de interposición enviadas por la ONU Eslavonia Oriental. El Consejo mostró su malestar por las constantes violaciones del alto el fuego pactado y por la expulsión de civiles no serbios de esa zona.

La CE está pensando coordinar medidas sancionadoras con Washington, según manifestó ayer el ministro italiano de Exteriores, Gianni de Michelis. Por el momento, las sanciones comunitarias están orientadas a debilitar la economía serbia, con boicoteos y bloqueos económicos.

Por otra parte, los representantes del Ejército yugoslavo obtuvieron ayer garantías por parte de las autoridades bosnias de que las fuerzas serbias radicadas en cuatro cuarteles de la capital de Bosnia no serán atacadas cuando a partir de hoy empiecen a abandonar sus instalaciones.

La ONU dio ayer un nuevo golpe moral a Serbia al aceptar por aclamación la incorporación como miembros de pleno derecho a Eslovenia, Croacia y Bosnia-Herzegovina, en esta caso en contra del criterio del líder de la minoría serbia en Bosnia, Radovan Karadzic, quien así lo manifestó ayer en Lisboa, donde se discuten medidas pacificadoras, bajo patrocinio comunitario, para esta república. "Bosnia-Herzegovina es un Estrado inexistente. Todavía hay que fundarlo. Será malo para la ONU aceptar en su seno a un Estado que no existe", dijo Karadzic.

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