Las fuerzas de la ONU completan su retirada de Sajarevo

El comandante de la Operación Unprofor, nombre que recibe la misión de paz de la ONU en Yugoslavia, el general indio Satish Nanibiar, abandonó ayer Sarajevo, junto con el jefe de Estado Mayor de las tropas de la ONU, el general canadiense Lewis MacKenzie, y otros 100 oficiales. El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas recomendó la evacuación del comando del Unprofor de su sede en Sarajevo debido al deterioro de la situación bélica en la capital bosnia. El comando estará fijado temporalmente en Belgrado.

El sábado pasado, el primer convoy de 80 vehículos, con 200 oficiales evacuados desde Sarajevo, tardó 16 horas en recorrer los 300 kilómetros que separan Sarajevo de Belgrado debido a las barricadas interpuestas por grupos de milicianos en el camino. A 40 kilómetros de Sarajevo, el primer convoy fue detenido durante más de tres horas. "Temo que no tenemos la posibilidad de cumplir con nuestra tarea de asegurar la paz en Bosnia-Herzegovina", declaró Sedric Tornberry, el jefe de la seccíón civil de la Operación Unprofor. Tornberry precisó: "La misión de las fuerzas de la ONU depende del acuerdo y de la cooperación de todas las partes en el conflicto: en este momento, en Bosnia-Herzegovina no recibimos esta cooperación". Y añadió: "El problema es que las partes en conflicto en Bosnia-Herzegovina no tienen el control completo sobre sus tropas".

Sin embargo, la ONU dejó un retén compuesto por centenar de personas en la capital bosnia. formalmente todavía la sede de la operación de la ONU en Croacia. El coronel australiano John Wilson estará al mando de un centenar de observadores militares, soldados de escolta y de protección estacionados en Sarajevo para facilitar los encuentros entre las partes beligerantes en la guerra y supervisar la distribución de ayuda humanitaria.

El general Nambiar apareció personalmente en la televisión para solicitar el cese de las hostilidades. Sin resultados. La sede del Unprofor fue sede del último acuerdo sobre el alto el fuego, violado pocas horas después.

Semanas después del comienzo de la guerra en Bosnia, el general Nambiar insistía en permanecer en Sarajevo, pero las comunicaciones cortadas y el peligro para sus tropas, además de la imposibilidad de realizar las tareas en Croacia, donde se han desplegado ya unos 11.000 de los 14.000 soldados previstos para la operación, le han obligado a aceptar la evacuación temporal.,

Sarajevo permaneció sin los monitores de la Comunidad Europea, y también la abandonaron la mayoría de los periodistas extranjeros debido al peligro y a la imposibilidad de trabajar. Un fotógrafo español, Jordi Pujol. Puente, de 25 años, que trabajaba para el diario catalán Avui, murió ayer al ser alcanzado por una granada.

Las tropas serbias, decididas a dividir étnicamente Bosnia, continuaron ayer sus avances para asegurar el control de los nuevos territorios. Los combates siguieron en Mostar, al suroeste de la república, ciudad que las fuerzas serbias y las; croatas intentan dividir en dos. Radio Belgrado anunciaba ayer el avance de las tropas serbias, hacia Gorazde, una de las pocas ciudades de Bosnia orienta] que aún controlan las fuerzas musulmanas.

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