El jurado del 'caso King' difiere al interpretar la sentencia absolutoria
Voces anónimas, identificadas como las de varios de los 12 miembros del jurado que emitió la sentencia absolutoria en el juicio contra cuatro policías blancos acusados del apaleamiento de Rodney King, lamentaron o confirmaron el jueves en diferentes programas de la televisión norteamericana la decisión que ha provocado una revuelta de la minoría negra de dimensiones nacionales. Los responsables de las cadenas de televisión CNN, ABC, CBS y NBC explicaron que cada una de las intervenciones que emitieron había sido verificada antes de salir al aire.
La intervención mas impresionante fue la de una mujer, cuyos recuerdos sobre el juicio la hacían llorar desconsoladamente. A través del hilo telefónico, declaró en directo en un programa de la cadena NBC que tanto ella como otros tres miembros del jurado, una mujer y tres hombres, se opusieron a la declaración de inocencia de los policías.Posteriormente, explicó, los cuatro miembros contrarios a la declaración de inocencia cedieron ante la presión de los otros ocho favorables a absolver a los policías. A pesar de la presión del periodista que la entrevistaba, la mujer se negó reiteradamente a explicar la razón por la que cedió. La decisión del jurado tenía que ser unánime para que la sentencia fuera válida. "Lo que vi en la cinta demostraba que se habían excedido en el uso de la fuerza", dijo. Entre lloriqueos que interrumpían sus palabras, añadió: "Peleé duro porque consideraba que no estábamos haciendo justicia", dijo, "y traté de usar el vídeo como evidencia".
La versión de otros de los presuntos miembros del jurado que hicieron declaraciones públicas fue muy distinta. Otra de las mujeres del jurado declaró en otro programa de la NBC que el vídeo lo único que demostraba es que el apaleado King "era el que ocasionaba las acciones de la policía. Fue él quien determinó cuánto se tardaba en esposarle, debido a que no dejaba de pelearse con el agente. El policía tenía que hacer lo posible por sujetarle para impedir que siguiera cometiendo delitos".
Cuando el periodista que la entrevistaba le preguntó, atónito: "¿Está segura de que en ningún momento perdió el control de la situación?", la voz femenina contestó sin inmutarse: "Nunca perdió el control. La acción llegó a su término cuando dejó de resistirse al arresto. E incluso mientras estaba siendo esposado seguía riéndose y gritando. No; estuvo todo el tiempo controlando la situación".
Los expertos se han apresurado a encontrar el porqué los miembros del jurado llegaron a una conclusión tan diferente a la de los millones de personas que quedaron impresionadas por el vídeo que recoge los 56 porrazos que la policía descargó sobre un individuo tumbado en el suelo. Para algunos especialistas la clave puede estar en el hecho de que el jurado viera más de 30 veces las imágenes, a cámara lenta y congelando movimientos, y que como consecuencia de ello quedarán insensibilizados.
Otros expertos se inclinan más por el hecho de que la población espera de la policía que la protega al precio que sea, y que no la juzga como al resto de los ciudadanos.
Heridas leves
Según explicó otro de los presuntos miembros del jurado en la cadena CBS, su impresión sobre los acontecimientos cambió radicalmente desde que vio las imágenes por primera vez hasta que asistió al juicio. "Al principio parecía que había resultado gravemente herido, pero luego descubrí que las heridas fueron leves", dijo.
"Los medios de comunicación han exagerado el vídeo [de 81 segundos de duración] del 3 de marzo de 1991, la gente sólo ha visto unos momentos, no se da cuenta de que la policía tiene un trabajo que hacer y que está instruida para actuar y reaccionar. Es extremadamente desafortunado, pero no podíamos llegar a ningún otro veredicto", explicó para defender su apoyo a la sentencia de inocencia para los agentes de la autoridad.
Se desconoce a ciencia cierta cuántos miembros del jurado participaron en la discusión pública de su postura, ya que su anonimato está protegido por decisión judicial. Se sabe que ninguno de ellos es negro y que tienen edades que van desde los 38 a los 65 años. Sus trabajos son igual de variados: un técnico de informática, varios trabajadores sanitarios, un ex guarda jurado, un trabajador de mantenimiento, un maestro retirado, un impresor, un empleado de un aparcamiento y un empresario inmobiliario retirado. Tres de ellos pertenecen a la Asociación del Rifle (poderoso grupo de presión de EE UU), uno está a favor del control de armas y otro es hermano de un policía retirado. Fueron seleccionados en un área donde tan sólo el 2% de la población pertenece a la raza negra.
El jurado -compuesto por 12 miembros: 10 blancos, 1 asiático y 1 hispano- acordó por unanimidad liberar de todos los cargos a tres de los cuatro policías. Uno de los cargos, por excesivo uso de fuerza, del que se acusaba al oficial Laurence Powell, sigue pendiente, ya que el jurado no se puso de acuerdo en el veredicto.
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