Trípoli niega la salida a un español
Las autoridades de Trípoli han denegado el visado de salida a un ciudadano español, Francisco Toro, que trabaja con la empresa Ferrovial en Libia, según informaron ayer fuentes diplomáticas españolas. Tanto en Madrid como en Trípoli se están efectuando gestiones diplomáticas para conseguir que Toro pueda abandonar el país.Los embajadores de los países de la Comunidad Europea en la capital libia reiteraron el martes su preocupación al Gobierno de Muammar el Gaddafi por las dificultades con que tropiezan los europeos que tratan de salir de Libia -un centenar de los cuales no ha recibido autorización de partida- y ayer solicitaron una entrevista con el número dos del régimen, Abdel Salaam Jallud, para tratar la cuestión. Oficialmente no hay cortapisas de ningún tipo y se insiste en que las fronteras están abiertas.
La colonia española en el país norteafricano era de 150 personas hasta que el Ministerio español de Exteriores recomendó hace unas semanas que lo abandonaran, cosa que en su día hicieron 15 personas. De los 135 que aún permanecen allí, unos 20 han manifestado su intención de salir antes de que el día 15 entren en vigor las sanciones impuestas por la ONU por la negativa libia a entregar a los agentes implicados en el atentado de Lockerbie. Los nacionales de los Doce no son los únicos que encuentran trabas. Piotr Adamski informa que hay casi medio centenar de ciudadanos polacos que no pueden salir aunque lo solicitaron en los últimos días, informó ayer el Ministerio polaco de Asuntos Exteriores anunciando "gestiones enérgicas" de su Embajada en Trípoli. En Libia residen unos 3.000 polacos, en su mayoría médicos e ingenieros, contratados por el Gobierno.
