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Las empresas madrileñas autorizadas amenazan con no recoger el aceite usado

Gabriela Cañas

Las cinco pequeñas empresas autorizadas que se dedican en Madrid a recoger el aceite mineral usado no saben qué hacer con tantos bidones almacenados. En seis meses han acumulado un mínimo de 2.500 toneladas. La única empresa que recicla este aceite contaminante está en suspensión de pagos. Una de las razones es que la Administración ha recortado la subvención. el resultado es que los recogedores amenazan con abandonar el negocio, lo cual es casi provocar un desastre ecológico.

El sistema ha funcionado hasta hace dos años. Varias empresas -cinco en Madrid son ahora las autorizadas- recogían el aceite usado -por ejemplo en talleres de automóviles- y lo vendían a una empresa, Ulibarri, SA, que lo reciclaba. La actividad, aunque lucrativa, es de interés social, ya que estos aceites minerales usados son altamente contaminantes.El problema es que el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) -concretamente la Dirección General de Política Ambiental- ha recortado la subvención a Ulibarri. "Siempre pagaban tarde", explica Rafael Rivero, secretario general de esta empresa ubicada en Arganda del Rey. "Pero es que ahora, además de tarde, están pagando menos de lo estipulado". Así, según Rivero, mientras que en 1990 recibieron una subvención de 210 millones de pesetas, para 1991 recibirán 119 millones.

Tal recorte fue "una de las razones, no la única", según Rivero, de que Ulibarri presentara suspensión de pagos en septiembre del pasado año. Se da la circunstancia de que Ulibarri es la única empresa que se dedica en España a reciclar el aceite mineral usado.

"Ulibarri nos debe dinero", dice Juan González Álvarez, uno de los cinco empresarios que se dedica a recoger el aceite. "Nosotros hemos seguido recogiendo, pero ya no sabemos qué hacer con tanto aceite". González ha acumulado ya 600.000 kilos de este residuo, y en su almacén de la carretera de Toledo no cabe un sólo bidón más. Ha tenido que alquilar un solar cercano para depositar el aceite, y se queja de la impasible actitud de la Administración ante un problema tan grave. "Nosotros no deberíamos ocupamos del almacenamiento de estos residuos".

Por escrito

La situación es similar en las otras cuatro empresas autorizadas por la Comunidad de Madrid para recoger el aceite. "Nosotros tenemos almacenados 500.000 kilos", dice un portavoz de Aceites Valero, SL, de Leganés. Esta empresa plasmó por escrito su amenaza de abandonar la actividad, mediante una carta enviada a la Agencia del Medio Ambiente (AMA) de la Comunidad de Madrid. Pero es una de tantas cartas que en este conflicto no ha obtenido contestación alguna. La distribución de competencias es algo compleja, ya que la subvención la otorga el MOPT, que la entrega a la AMA para que ésta la abone a empresas como Ulibarri.La respuesta de la Agencia de Medio Ambiente sobre esta situación, a instancias de este periódico, es que en este momento "se está intentando saber cuál es la magnitud del problema". Según palabras de su director, Luis Maestre, "hay que hacer un inventario de productores y recogedores de aceite para controlar totalmente el proceso".

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En Ulibarri, SA, se venía reciclando un total de 35.000 toneladas anuales de aceite, pero la producción está descendiendo alarmantemente. Rivero pone en duda el futuro de la empresa. "Ahora ha empezado a funcionar en Sagunto (Valencia) una empresa como ésta", dice. "Están asustados. Si las subvenciones siguen bajando se están planteando hacer la suspensión casi antes de empezar a funcionar".

Cada 15 días

La situación de los cinco "gestores de recogida de aceites usados" es ahora crítica. Cada uno recoge tres o cuatro cisternas cada 15 días -y cada cisterna tiene 30.000 litros-, mientras que Ingresa -empresa estatal que gestiona el almacenamiento, el análisis y la distribución de residuos- sólo les está admitiendo una cisterna cada 15 días.Ninguno de los afectados entiende el recorte. "Llevo 24 años en este negocio", explica Juan González, de la empresa recogedora Sagrario Cano Jiménez, "y nunca nos había pasado esto. Ahora que parecen preocuparse tanto del medio ambiente es cuando provocan esta crisis".

En Obras Públicas fue imposible recabar datos estos días pasados. "Estamos en cuadro", dijeron en la oficina de prensa. "Casi todo el mundo se ha ido de puente".

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Sobre la firma

Gabriela Cañas
Llegó a EL PAIS en 1981 y ha sido jefa de Madrid y Sociedad y corresponsal en Bruselas y París. Ha presidido la Agencia EFE entre 2020 y 2023. El periodismo y la igualdad son sus prioridades.

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