El arzobispado de Valencia emite sus obligaciones sin garantías hipotecarias

Bancaja, la cuarta caja de ahorros española por recursos ajenos, gestionará al arzobispado de Valencia la emisión de obligaciones por valor de 1.000 millones de pesetas destinada a la construcción de nuevos templos.El arzobispado, el primero de España que ha elegido este sistema de financiación, está considerado como uno de los de mayor solvencia y transparencia contable, lo que ha permitido a los responsables eclesiásticos emitir los títulos sin firmar garantías hipotecarias y con gastos de intermediación muy bajos.

El delegado para temas económicos del arzobispado de Valencia, Juan Pérez Navarro, explicó que los títulos no cotizarán en las bolsas y explicó que se rechazó la posibilidad de solicitar créditos por el mayor coste financiero.

El arzobispado, que tiene problemas de liquidez actualmente, destinará los 1.000 millones de pesetas a la construcción de 21 nuevos templos en Valencia y uno en las localidades de Gandía, Denia, Alcoy, Paterna y Torrent -algunos de los cuales están muy avanzados y con los costes de edificación pendientes de pago-.

La decisión de construir templos, algunos de los cuales sustituirán a locales destinados al culto en malas condiciones, contrasta con la última encuesta eclesiástica, que indica que sólo el 30% de los valencianos se declara católico practicante.

Rafael Sanus, obispo administrador de la diócesis, afirmó ayer que "es mucha la gente que va a misa" y que en los barrios periféricos de Valencia, con una población básicamente inmigrante y "mucha deshumanización", la Iglesia puede ser un "elemento integrador".

La emisión de obligaciones simples por valor de 1.000 millones de pesetas, autorizada por la Santa Sede y la Comisión Nacional del Mercado de Valores, se concreta en títulos de 10.000 pesetas con un plazo de amortización de 10 años y a un interés anual del 9%. Ésta es la cuarta vez que el arzobispado de Valencia lanza una emisión de obligaciones, la primera se realizó en 1941, la segunda en 1951 y la tercera en 1971, todas ellas para -realizar- nuevas edificaciones.

Juan Pérez Navarro manifestó que el arzobispado firmará contratos con cada una de las nuevas parroquias para la devolución de las cantidades financiadas, aunque no les cobrará el interés pagado a los suscriptores de las obligaciones subordinadas.

En Valencia, el 32% -un 2% menos de la media nacional- de las personas que realiza la declaración de la renta opta por destinar parte de sus impuestos a la Iglesia, aunque Pérez Navarro aseguró que las parroquias se autofinancian en un 95% y que el 5% restante se suple con la recaudación del IRPF.