El juez impone 50 millones de fianza al asesor inmobiliario de García Valverde por el 'caso Renfe'

José Luis Pinedo, antiguo asesor del ex presidente de Renfe y ex ministro de Sanidad Julián García Valverde, quedó ayer en libertad después de haber depositado una fianza de 50 millones que le impuso el juez de delitos monetarios, Miguel Moreiras. La resolución judicial sobre Pinedo se produjo después de prestar declaración acerca de las presuntas irregularidades derivadas de la compraventa de terrenos en San Sebastián de los Reyes. El ex director general de la empresa ferroviaria José María Rodes, que también declaró ante el juez, fue puesto en libertad sin cargos.

El magistrado interrogó a los antiguos directivos de Renfe sobre los hechos contenidos en la denuncia y que se refieren a la contratación de dos estudios sobre el mercado inmobiliario en Madrid, abonados a las empresas Syopsa y ABC Empresarios, y la cancelación de un contrato de arrendamiento inexistente por el que Equidesa pagó a Cemsa 32 millones de pesetas. Renfe calificaba los hechos en la denuncia de malversación de caudales públicos, falsedad y estafa. Pinedo declaró que él no encargó los citados informes y desconoce quien lo hizo, pero que, no obstante, los estudios se hicieron y que "estaban en su mesa". Rodes también negó tener relación con ellos.50 'kilos' en casa

La declaración de Pinedo se ciñó básicamente a lo expuesto ante la comisión de investigación del Congreso, aunque a preguntas del fiscal sobre la compra el 20 de mayo de 1990 de dos parcelas a la empresa intermediaria Toher, reconoció haberse quedado con dos talones de Renfe por valor de 40 y 10 millones de pesetas, correspondiente al dinero supuestamente pagado por la ferroviaria a Toher SA.

A cambio, y con dinero negro que Pinedo "tenía en su casa", realizó una entrega de 40 millones en metálico a los hermanos Serrano Alberca, y otra de 10 millones a Félix García Rodrigo, ya fallecido, que era propietario o administrador de Geamf SA. Esta segunda operación se realizó 4 o 5 días después de cerrarse la operación de compraventa con Toher.

Sin embargo, ni los hermanos Serrano Alberca, ni Félix García Rodrigo figuraban como representantes de Toher en esas operaciones. Los Serrano Alberca, incluso, desmintieron en su día cualquier relación con la empresa Toher S.A. Oficialmente, el administrador único de esta sociedad era Carlos Martín Rivas, que según ha manifestado en reiteradas ocasiones nunca percibió cantidad alguna, ni tan siquiera su comisión, por poner la firma en las compraventas de fincas que terminaron en poder de Renfe.

Martín Rivas, según consta en la denuncia de Renfe, reclamó al presidente de Equidesa, Alberto Echeverri, su comisión y el IVA correspondiente por la citada venta de las dos parcelas de Toher a Equidesa por un importe final de 279 millones. Martín Rivas ya declaró ante el juez Moreiras que la venta de las dos parcelas que tuvo que firmar le había sido encargada por Carlos de Juan Villa y Salvador Marín, ambos implicados en el denominado fraude del IVA. También indicó que en las compraventas entre Toher y Equidesa no se manejó dinero alguno. Salvador Marín le explicó que ya harían la factura más tarde y que le pagarían la comisión cuando estuvieran preparados los recibos.

Carlos de Juan Villa es socio de varias de las empresas ficticias utilizadas en el fraude del IVA, entre ellas ABC Empresarios y Syop SA, que recibieron dinero de Renfe por los informes del mercado inmobiliario.

Por su parte, Pinedo dijo que efectuó la operación de compra de talones a los hermanos Serrano Alberca con dinero que tenía en su casa fue porque "en ningún momento tenía conciencia de estar cometiendo ninguna ilegalidad pues en caso contrario hubiera podido utilizar otras formas de ocultar el dinero B".

Esta declaración judicial se produce después de la comparecencia de José Luis Pinedo ante la comisión parlamentaria de investigación por las compraventas de Renfe en la localidad madrileña de San Sebastián de los Reyes. En esa ocasión reconoció ante los parlamentarios haber manejado 70 millones de pesetas en dinero negro.