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Obiang justifica la represión atribuyendo a sus opositores prácticas de hechicería

Acusaciones de hechicería para justificar arrestos arbitrarios, palizas y torturas propinadas por la guardia presidencial marroquí, detención y confinamiento de los exiliados políticos que regresan al país conriados en la nuevas leyes de amnistía y libertades políticas. Son los métodos con que el régimen del presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang, intenta "evitar la creación de una oposición viable", según un informe del Departamento de Estado norteamericano sobre la ex colonia española en el África negra. A pesar de las gestiones diplomáticas occidentales, se desconoce la suerte de las víctimas de la redada del pasado fin de semana.

Ante la preocupación suscitada por la nueva ola represiva desencadenada por el régimen de Obiang el pasado fin de semana, los representantes en Malabo de diversos países y organizaciones -entre ellos Estados Unidos, España, Francia, Naciones Unidas y la Comunidad Europea- efectuaron el miércoles una gestión conjunta de protesta ante las autoridades ecuatoguincanas para que, en un plazo de 24 horas, les permitiesen visitar a Plácido Micó y a Juan Antonio Dorronsoro -éste último es hijo de español y de nacionalidad española-, los dos detenidos que permanecen en manos de la guardia presidencial marroquí desde el pasado fin de semana.Como afirman informes de organizaciones como Amnistía Internacional, dicha guardia es conocida en Guinea Ecuatorial por la brutalidad de las torturas aplicadas a los presos políticos.

En el trasfondo de esta iniciativa se halla la amenaza de suspender las ayudas económicas al régimen de Obiang y de las que depende la mísera economía de la ex colonia española, según informaron a esta diario fuentes diplomáticas en Malabo. A pesar de ello, a última hora de la tarde de ayer las autoridades guineanas todavía no se habían dignado brindar una respuesta.

Al parecer, las autoridades guineanas acusan a los detenidos de ser los responsables de octavillas y revistas clandestinas del Partido de la Convergencia Democrática Social. Dicha organización es una de las varias en Guinea Ecuatorial que no ha logrado la legalización teóricamente permitida por la flamante ley de partidos y que no recooce la pertenencia a sus filias de dichos detenidos.

Garantias

Los representantes de Estados Unidos y Naciones Unidas seguían ayer negociando con la policía guineana la obtención de garantías para la salida de sus representaciones de otros cuatro profesionales buscados por las autoridades.

[El Gobierno guineano, por su parte, censuró ayer la actitud de varias misiones diplomáticas acreditadas en Malabo por su participación "en la difusión de documentos subversivos". El ministro portavoz del Gobierno, Antonio Fernando, expresó su descontento por la "aportación de los medios logísticos de estas instituciones que están fomentando actividades clandestinas", informa Efe desde la capital guineana.]

Un reciente informe del Departamento de Estado de Washington sobre Guinea Ecuatorial subraya como, tras haber promulgado una nueva Constitucion, ley de partidos y amnistía, el régimen de Obiang está actuando con el fin de "evitar la creación de toda oposición política viable".

Para ello, asegura el texto, Malabo hace uso habitual de detenciones arbitrarias o el aducir acusaciones de kong -hechiceria que se cree puede causar heridas o muerte a las víctimas del mal de ojo- "para encarcelar a los sospechosos de participar en actividades políticas así como para venganzas personales".

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