Se busca el alga asesina
Francia pide ayuda para hallar el alga tropical "Caulerpa taxifolia", que amenaza la costa mediterranea
No es ni una delincuente armada ni una peligrosa terrorista y, sin embargo, en Francia es perseguida como tal. Para estrechar el cerco entorno a ella, la Administración ha distribuido un folleto en el que llama a Ios submarinistas, pescadores, paseantes y todos los observadores del mundo submarino" a facilitar cualquier dato sobre su paradero. Se trata de la Caulerpa taxifolia, la depredadora alga tóxica tropical que ha poblado por accidente más de 300 kilómetros del fondo del Mediterráneo francés y avanza hacia aguas españolas.
Quién hubiera imaginado en 1984, cuando un trozo de un ejemplar de Caulerpa taxifolia que se exhibía en el Museo Oceanográfico de Mónaco se coló por el desagüe, que ocho años después la planta, que expulsa una sustancia letal, habría colonizado ya toda la costa Mediterránea francesa y estaría a punto de penetrar en aguas españolas. Y, lo que es peor, que, a su paso, habría eliminado las formas de vida submarinas autóctonas.Esta grave alteración, sobre la que han advertido insistentemente científicos de la zona afectada, ha decidido al Gobierno francés a editar un díptico informativo, en cuya portada aparece una fotografía del alga junto a una moneda de un franco -para que pueda apreciarse la proporción- con una curiosa leyenda: "Se busca".
En el folleto, editado a todo color, se insta a quienes encuentren la planta a comunicarlo inmediatamente al laboratorio marino de la Universidad de Niza con las siguientes precisiones: situación geográfica; profundidad; entorno (si el alga está fijada en la roca, en la arena o en las praderas de Posidonia, por ejemplo) y otras informaciones, como densidad de las hojas, longitud, etcétera.
Plan de lucha
Precisamente, la localización de todas las colonias del alga tóxica en aguas francesas es el primer objetivo que establece el plan de lucha contra la Caulerpa taxifolia, elaborado el pasado 21 de enero por un grupo de científicos dirigidos por el profesor Charles François Boudouresque y que cuenta con financiación gubernamental.Este proyecto, cuyo plazo de ejecución es de 18 meses, tiene un presupuesto de 1,9 millones de francos (unos 38 millones de pesetas).
¿Cómo consigue el alga eliminar la flora y la fauna con la que cohabita?. ¿Qué clase de toxinas expulsa?. ¿Existen diferencias genéticas entre la Caulerpa taxifolia asentada en el Mediterráneo y la que vive en aguas tropicales?. ¿A qué ritmo crece?. ¿Cuáles son las condiciones ambientales que la mantienen?.
Éstas son las cuestiones que deben resolver los investigadores marinos, ya que por ahora se ignora prácticamente todo acerca de la planta y no ha podido evaluarse aún con cifras el mal que ha causado. Sólo se sabe que, siendo absolutamente inofensiva en sus mares de origen, lejos de ellos elimina las formas de vida que la rodean.
Para el biólogo marino Enrique Ballesteros, del Centro de Estudios Avanzados de Blanes -dependiente del Consejo Su perior de Investigaciones Científicas- es difícil saber si el alga puede llegar a afectar a la pesca. "Los peces herbívoros emigran a lugares donde tengan qué comer sin peligro de muerte y los carnívoros van allí donde hay peces. De esta forma, se crean nuevos bancos y los pescadores pueden dirigirse a faenar a esos lugares", argumenta el científico.
Con todo, insiste en que el alga es altamente perjudicial para el patrimonio biológico del fondo marino. "El peligro está precisamente en que las especies autóctonas con capacidad de movimiento se marchen y las estáticas como los moluscos, la Posidonia, las algas o las esponjas mueran aprisionadas por la Caulerpa taxifolia. Así, la riqueza biológica de la zona queda notablemente alterada".
Cerca de Cataluña
Según Ballesteros, al impresionante crecimiento del alga letal pueden haber contribuido vertidos incontrolados de aguas procedentes de peceras y acuarios particulares que contienen ejemplares de Caulerpa taxifolia, ya que en Francia ésta puede encontrarse fácilmente en las tiendas donde venden peces de colores y animales domésticos, al precio de 30 francos (600 pesetas) los 20 centímetros.No sólo el Gobierno francés ha tomado cartas en el asunto. La Administración italiana y la autonómica catalana se han mostrado también sensibles al peligro que supone el avance de la planta, cuya colonia más al sur se ha localizado en Saint-Cyprien, a 30 kilómetros de la Costa Brava; y la situada más al norte en aguas de Menton, en la misma frontera con Italia.
El pasado martes una delegación del Departamento de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Generalitat partió hacia Francia para obtener información de primera mano sobre el alga. El equipo de biólogos catalanes se desplazó hasta el Instituto Francés de Investigación para la Explotación del Mar (Ifremer), con el cual han estado en contacto permanente desde que apareció la planta.
Los científicos italianos están estudiando las características de la sustancia tóxica letal que expulsa la Caulerpa taxifolia mientras que el plan de la Generalitat, de un año de duración y presupuestado en 12 millones de pesetas, es puramente preventivo. Se limita al control de la aparición de la especie en aguas españolas ' y a evitar la comercialización de esta especie en tiendas de animales domésticos.
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