Plante en TudeIa de la Sinfónica de Euskadi por un retraso de tres minutos en un viaje
Los músicos de la Orquesta Sinfónica de Euskadi se negaron en la noche del pasado jueves a interpretar un concierto en el teatro Gaztambide de la ciudad navarra de Tudela, al haber durado su viaje de traslado desde Madrid tres minutos más de las cinco horas que como duración máxima en sus desplazamientos tienen estipulado en su convenio laboral.Los cerca de 500 espectadores que habían abarrotado el teatro tudelano para escuchar a la Sinfónica de Euskadi en la interpretación de obras del músico de Tudela Fernando Remacha reaccionaron con abucheos, gritos y pitidos al conocer la decisión de los músicos de realizar tal plante. El teatro fue escenario de un gran escándalo, del que fue testigo privilegiado el presidente del Parlamento foral de Navarra, Javier Otano, que era uno de los espectadores asistentes.
El jefe del servicio de acción cultural del Gobierno de Navarra, José Ortega, y el concejal de Cultura del Ayuntamiento de la ciudad, Benito Sangüesa, se vieron obligados a anunciar al público cuando pasaba ya más de media hora del tiempo previsto para el inicio del concierto, las ocho de la tarde, que, según habían sido informados por representantes del comité de empresa de los alrededor de 90 músicos de la orquesta, éstos habían decidido no trabajar "porque en el trayecto desde Madrid a Tudela han invertido cinco horas y tres minutos, cuando su convenio especifica que no pueden tardar más de cinco horas", según afirmó Ortega.
Gritos de "fuera, fuera", insultos, pitidos y frases como "no volváis más" e "iros a vuestra casa" se escucharon en el teatro mientras los músicos, en su mayoría con ropa de calle, permanecían entre bastidores.
Los miembros del comité de empresa de la. orquesta José Ignacio Aizpiri y Castor Narvarte explicaron así los motivos del peculiar plante: "La administración de la orquesta prepara las actuaciones con muchas horas de viaje y escaso margen horario (le una a otra. Ante ello hemos decidido plantarnos, porque se viene repitiendo varias veces. Se trata de un problema de organización de viajes".
Respecto a la duración del trayecto, manifestaron: "Hemos aplicado un artículo del convenio que señala que debe haber cinco horas de viaje como máximo. En esta ocasión se ha rebasado este tiempo y además hemos llegado con menos de media hora para el inicio del concierto". "Obviamente", concluyeron, "la gente ha votado que no se hiciera".
La orquesta tenía firmado un contrato por una cuantía superior al millón y medio de pesetas con el Gobierno navarro y el Ayuntamiento de Tudela, organizadores del mismo. El presidente del Parlamento foral, el socialista Javier Otano, expresó su malestar e indicó que la orquesta debía pedir disculpas al pueblo de Tudela por su actitud.
