Portugal quiere reforzar la política, común de los Doce en el sur y este de Europa

La presidencia portuguesa dedicará sus esfuerzos a reforzar la política exterior común de los. Doce para superar la vocación hasta ahora puramente económica de la Comunidad" según manifestó ayer en Estrasburgo el ministro portugués de Asuntos Exteriores, Joáo de Deus Pinheiro. La prioridad es el apoyo político y económico para mantener la estabilidad en el Mediterráneo, así como "superar la trágica ausencia de paz en Yugoslavia" e incrementar la cooperación con las repúblicas de la ex URSS.La presentación ante los eurodiputados del programa de Portugal para este semestre, en que desempeña la presidencia de turno de la CE, tuvo un perfil bajo. Pinheiro se mostró especialmente cauteloso sobre el reconocimiento de la independencia de otras repúblicas yugoslavas, después del de Eslovenia y Croacia. "Tenemos que seguir discutiendo el tema", afirmó, nuentras que, en su opinión, la paz pasa por la cooperacion entre la CE y la ONU.

Con respecto a las repúblicas de la antigua URSS, el ministro portugués informó que la CE tiene preparados dos documentos sobre la ayuda a movilizar, que serán presentados en la conferencia de Washington de los próximos 22 y 23de enero. El día 25 la troika comunitaria (los ministros de Portugal, Holanda el Reino Unido) iniciará un viaje a Moscú, Kiev, Minsk y Almá Atá para concretar sobre el terreno los envíos de alimentos y. las garantías para su distribución.

Por otra parte, la Comunidad Europea necesita dar una respuesta al problema de su ampliación y, en junio, la cumbre de Lisboa aprobará un informe sobre la estrategia a seguir para el ingreso de futuros miembros.

Calendario apretado

La presidencia portuguesa.. tiene ante sí un apretado calendario en el que predomina la "culminación del programa del mercado único de l993". Todos los restantes proyectos estarán "subordinados" a este objetivo. Sin embargo, entre las tareas urgentes heredadas de Maastricht, Portugal debe intentar cerrar el acuerdo con los países de la EFTA, propiciar el compromiso sobre la Ronda Uruguay del GATT, acordar la reforma de la política agrícola y fijar el dinero del paquete destinado a la cohesión económica y social.

En contra del interés del presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors, por celebrar una cumbre extraordinaria en abril para debatir este último tema, Portugal es reticente a forzar la máquina ante la perspectiva de un fracaso. Fuentes de la presidencia portuguesa manifestaron ayer que "no será posible alcanzar en abril un consenso que abarque la cohesión y la reforma de la política agrícola común". Lisboa quiere dejar el paquete para la cumbre de junio, con lo cual se complicarán las perspectivas de un acuerdo favorable sobre el dinero de la cohesión, un terna por el que tanto ha batallado España.