La Asamblea de Madrid acuerda el reparto del consejo de la Caja de Madrid

Los principales grupos políticos de la Asamblea de Madrid acaban de llegar a un acuerdo para el reparto de los puestos del consejo de administración de la Caja de Madrid. De los 20 puestos del consejo, ocho los ocuparán los ayuntamientos, siete los impositores, tres la Asamblea de Madrid y dos los trabajadores.

El reparto de los sillones en el órgano de decisión de la caja era el principal escollo en la elaboración del proyecto de ley que se ha negociado entre el PSOE, el PP e Izquierda Unida en los últimos meses. Asimismo, también era complicado llegar a un acuerdo sobre la continuidad o no de un presidente ejecutivo. En ambos se ha llegado a un acuerdo, por lo que la ley, que será discutida este mes en el Parlamento madrileño, puede comenzar a aplicarse en la próxima primavera.Sobre la continuidad del actual presidente, el PSOE y el PP, los dos principales grupos de la comunidad, han conseguido un consenso para establecer un mecanismo que permita la continuidad por otros cuatro años del actual presidente, Jaime Terceiro, que será elegido dentro de los ocho representantes a que tienen derecho los ayuntamientos.

La Asamblea de Madrid tendrá por primera vez tres representantes directos en el consejo de la entidad financiera. Fuentes de la Consejería de Hacienda, que dirige Ramón Espinar, han señalado que el proyecto de ley se ha elaborado desde el consenso y con las miras puestas en la continuidad del actual equipo, para evitar un parón en una entidad que cuenta ya con casi dos billones de pesetas de recursos ajenos.

El punto más difícil de negociación fueron los cupos en el consejo. Al final, el Ayuntamiento tendrá ocho puestos, es decir, el 40% del consejo; los impositores siete puestos, es decir, el 35%; la Asamblea de Madrid, tres puestos, o sea, el 15%, y el restante 10% lo ocuparán dos representantes de los trabajadores. Para la asamblea general también se aplican estos porcentajes. La nueva asamblea de la Caja eleva el número de miembros de 160 a 320 y la proporcionalidad es la misma que en el consejo. Los ayuntamientos tendrán 128 puestos, y así sucesivamente.

Falta cerrar de forma definitiva la fórmula de elección del presidente del consejo. El PP defiende que se elija por tres quintos de esos 20 votos. Esto, según el PSOE, supone el peligro de que se bloquee la elección del presidente o que las minorías puedan imponerlo. Por eso el PSOE propone que se elija por mayoría simple, es decir, con 11 votos de los 20 previstos. Izquierda Unida propugna un director general que contrapese el poder del presidente ejecutivo, aunque los demás grupos optan porque no haya director general.