Un escolta del Rey fallece desnucado en uno de los primeros accidentes de tráfico 1992
La primera noche del año registró en las calles de Madrid 24 colisiones de importancia; casi el doble que las ocurridas el pasado año, que terminó con 14 colisiones y 10 heridos leves. Esta vez, además, uno de los automovilistas, que fue posteriormente identificado como uno de los escoltas del Rey, resultó muerto. La Policía Municipal intervino en 24 colisiones, y los bomberos hicieron 52 salidas desde la medianoche de] 31 hasta la tarde de ayer.
La colisión más grave se produjo en el cruce del paseo de Extremadura con la avenida de Portugal, en una de las salidas de la ciudad (N-V), alrededor de las 9.40. Un coche Citroén (AV-9297-C) conducido por Javier Ballesteros Navarro, alcanzó lateralmente al Renault 12 (M-7665-BY) que dirigía Prudencio Águeda Tomé, de 50 años. El conductor de este último automóvil, que fue identificado por la agencia Efe en fuentes de la Casa Real como uno de los escoltas del Rey, salió despedido de su vehículo y falleció desnucado.,Prudencio Agueda, según estas fuentes, se dirigía a hacer el relevo a otro compañero en la clínica Puerta de Hierro, donde está ingresado el Monarca.
La Dirección General de Tráfico informó de que otro conductor, Jesús Carlos Fernández Palacios, resultó muerto casi al mediodía de ayer, a las 11.50, en el kilómetro 27 de la M-40. El coche, un Ford Fiesta, se salió de la vía y se empotró contra la mediana de hormigón.
Otra de las personas que resultaron heridas por accidente de tráfico el primer día de 1992 fue rescatada por los bomberos de su utilitario tras chocar, sobre las once de la mañana, contra un árbol del paseo de la Castellana, cerca de la plaza de Colón. Dos personas más tuvieron que ser ingresadas en un hospital tras derrapar la moto en la que se desplazaban, a la altura de la calle de Andrés Mellado. Los lugares donde se produjeron todos estos accidentes se repartieron por calles de toda la ciudad.
Los policías municipales, que realizaron en la primera madrugada del año un total de 42 intervenciones significativas, ocuparon buena parte de la noche en atender llamadas sobre quejas de vecinos por exceso de ruidos de locales de esparcimiento, molestias de petardos, etcétera. Desde las siete de la mañana y hasta las tres de la tarde del 1 de enero, el servicio de atención telefónica de la Policía Municipal (el 092) recibió alrededor de novecientas llamadas.
Los bomberos de la capital, por su parte, efectuaron esa noche 52 salidas, la mayoría para atender incidencias en la vía pública sin gran trascendencia. Losbomberos, además de auxiliar a la policía en algunos accidentes de tráfico, rescataron a personas de ascensores o de pisos donde se habían quedado encerradas y apagaron contenedores.
El servicio de urgencias de los hospitales también funcionó a buen ritmo. El número de las atenciones habituales se duplicó en alguno de los grandes complejos sanitarios. En las urgencias del Doce de Octubre se registraron 306 entradas en las 18 primeras, horas de 1992, la mayoría como resultado de accidentes de tráfico o de intoxicaciones etílicas. En La Paz, el departamento de urgencias de traumatología plástica y rehabilitación (accidentes de tráfico y caseros) inscribió 111 casos hasta las siete de la tarde de ayer, una cifra parecida a las que se producen un día normal, como las 284 entradas que se contabilizaban a esa hora en las urgencias generales del hospital Gregorio Marañón.
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