"En los paises del Este hay reactores nucleares de diseño soviético que no son seguros"
"Hay cuatro de estos reactores en Bulgaria, dos en Checoslovaquia y varios en la URSS, en la península de Kola", explica Blix. Por este motivo, el OIEA ha pedido a estos países que estudien la seguridad de las instalaciones, indicando las deficiencias y remedios posibles. "Algunas de las modificaciones que precisan son muy costosas, por lo que ahora tendrán que decidir si pueden pagarlas o cierran las plantas", dice Blix.La situación preocupa a varias naciones europeas, como Austria o Alemania, que tal vez podrán ayudar técnica o económicamente a Bulgaria, Checoslovaquia o la URSS. "Pero no hay hasta ahora ningún acuerdo internacional que obligue a los países a tomar, medidas, el OIEA se limita a indicar los problemas y a aconsejar", señala. "Es un tema que por ahora corresponde plenamente a la soberanía nacional de cada país", explica Blix. "Sin embargo, cada vez hay mayor preocupación por lo que sucede en materia de seguridad nuclear fuera del propio territorio, porque si algo sucede en Chernóbil o en cualquier otro lugar, inmediatamente tiene una fuerte repercusión psicológica en todo el inundo".
Normativa de seguridad
Ello ha propiciado la demanda de una normativa mínima internacional sobre seguridad nuclear obligatoria para todos los países, y los primeros borradores se discutirán en una reunión que se celebrará el pr&imo mes de diciembre. Podrán firmarla alrededor de 80 países, aunque actualmente son medio centenar los que tienen centrales nucleares.
Sobre la seguridad de las centrales españolas, Blix comenta que no hay en poder del OIEA ningún informe particular que la diferencie de la industria nuclear de otros países europeos. El director del OIEA es partidario de la transparencia en la información en este tema, e insiste en la necesidad de una mayor educación de la población acerca de la energía atómica: "Muy frecuentemente el tema se aborda de forma emocional. La radiación parece a menudo algo místico, y la gente no se preocupa de otros factores potencialmente peligrosos, como los productos químicos".
La escasez de energía será responsable del resurgir en un futuro próximo de las nucleares, según Blix. "Actualmente hay un parén nuclear en los países industrializados debido al estancamiento económico y a la oposición de la opinión pública. La gente se opone a prácticamente todas las formas de generar energía, ya sea la nuclear o la de combustible fósil, por la lluvia ácida que genera y por. su repercusión en el efect o invernadero, pero cuando haya recortes energéticos tendrán que elegir, porque la población, la industria y los sindicatos quieren energía, y habrá que optar entre las centrales de combustible fósil o las nucleares", asegura Blix.
La fusión y otras energías alternativas
La alternativa de la fusión nuclear, que ha logrado un éxito notable al conseguir hace dos semanas generar energía a partir de isótopos del hidrógeno en un reactor experimental, elimina problemas medioambientales como los residuos radiactivos, pero Hans Blix recuerda que es una tecnología no disponible aún y que faltan 50 años para pensar en comercializar esa fuente de energía."Apoyamos activamente la cooperación de Europa, EE UU, Japón y la URSS en el proyecto ITER (Reactor Termonuclear Experimental Internacional)", dice. Sin embargo, destaca la importancia que en el futuro van a tener los reactores rápidos, de fisión. "Los franceses, británicos y soviéticos ya tienen alguna instalación de este tipo, y los japoneses están construyendo una planta. Son centrales mucho más seguras que las actuales", afirma.
Acerca de las fuentes de energía renovables., como la solar o la eólica, Blix se declara partid ario de sudesarrollo, pero considera que no son una opción importante, ya que actualmente suministran aproximadamente el 0,5% de la energía en el mundo. Además, dice, la mayoría de los países no tiene condiciones geográficas aptas para las centrales hidroeléctricas. :
"En los próximos años, si se confirma el riesgo del efecto invernadero, habrá una preocupación muy seria sobre extender el uso del carbón o el petróleo, y la gente tendrá que hacer una revisión de la energía nuclear, como ya lo están haciendo algunos defensores del medio ambiente", comenta Blix.
En su opinión, son muy prometedoras algunas nuevas tecnologías nucleares, como los reactores pequeños, de unos 600 megavatios, y las centrales modulares, que permiten ir añadiendo reactores de 200 o 250 megavatios a medida que se necesiten. Todas ellas son, según Blix, más seguras que las actuales.
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