Guinea Ecuatorial niega el visado al líder opositor Moto en vísperas del referéndum 'democratizador'

A cuatro días de la celebración en Guinea Ecuatorial de un referéndum sobre una supuesta reforma democratizadora, las autoridades de la ex colonia española negaron ayer la entrada al país del dirigente opositor guineano Severo Moto "para evitar que le suceda algo" y a una periodista de este diario por "haber publicado el lunes un artículo que se inclina demasiado hacia un lado".

"Gestos como éstos son una nueva demostración de que lo que se está gestando en Guinea no es una apertura democrática, sino un cierre hermético a las libertades", declaró ayer a este diario el dirigente del opositor Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial, Severo Moto, poco después de que le fuese comunicada la negativa, por segunda vez en cinco meses, a su petición de entrada a la ex colonia española. "El presidente Felipe González debe ser muy consciente de ello cuando la próxima semana viaje a Malabo para no incurrir en la grave responsabilidad de ser instrumentalizado por el régimen de Obiang para legitimar ante el mundo lo que no es más que un intento de maquillaje de una burda dictadura", añadió el opositor guineano poco antes de viajar a la sede de la CE en Bruselas, adonde ha sido invitado a intervenir en una serie de conferencias sobre Desarrollo y democracia en África.En agosto, miembros de la representación diplomática guineana alegaron que no era posible tramitar el pasaporte de Moto debido a la ausencia del entonces embajador, Eduardo Ndongo, que, efectivamente, se encontraba por aquellas fechas en Malabo bajo arresto domiciliario indefinido.

Fue Bruno Esono, el flamante sucesor de Ndongo -fulminantemente destituido y devuelto a su país con todo el séquito de familiares que habían tomado puestos en la Embajada de Madrid-, quien expuso la postura oficial a Severo Moto. "A nivel personal, somos hermanitos, pero a nivel oficial debes esperar ", le subrayó el embajador al opositor al utilizar un término con el que en Guinea se eleva la amistad al máximo de los niveles, el de los lazos de consanguinidad.

El representante guineano que ocupó, entre otros, el cargo de consejero presidencial, explicó a Moto que el Gobierno guineano "está acelerando el proceso de democratización para salir del estancamiento en que se halla el país; pero, aunque ahora estamos respetando a las personas, hay que esperar a que aparezcan las leyes que permiten el multipartidismo para evitar que te suceda algo".

Eso no se refería a la ley de partidos que el presidente Obiang viene prometiendo desde la pasada primavera, en el marco de su supuesta apertura democrática, sin que todavía haya fecha sobre su aparición.

El embajador guineano en Madrid también explicó a Moto que otra de las razones por las que no puede concederle el pasaporte es que antes debe "analizar" si figura en una lista que se está elaborando de los guineanos "que se han manchado nacionalizándose como españoles".

La supuesta transición guineana tiene como siguiente paso la votación, este domingo, de un referéndum sobre una reforma de la ley fundamental. Este texto ha sido duramente atacado por la oposición interna y externa de Guinea Ecuatorial, puesto que ha sido elaborado sin consultar a las fuerzas políticas del país. La nueva Constitución establece que el jefe de Estado no podrá ser sometido a juicio "ni antes, ni durante ni después de su mandato" y excluye de un eventual proceso electoral a los partidos de oposición en el exilio.

Poco después de recibir a Moto, el embajador guineano comunicó a la periodista especializada en Guinea Ecuatorial de este diario el rechazo de su petición de visado para cubrir informativamente la consulta del domingo en Malabo.