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Los socialistas atacados por Alfonso Guerra buscan el respaldo de Narcis Serra

Anabel Díez

Los dirigentes socialistas atacados por Alfonso Guerra están buscando el apoyo y respaldo no sólo del secretario general del PSOE, Felipe González, sino también del vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra. Éste, que nunca ha estado muy próximo a Guerra y acabó sustituyéndole en la vicepresidencia del Ejecutivo, desayunó el pasado jueves en el palacio de la Moncloa con Teófilo Serrano, secretario general de la Federación Socialista Madrileña (FSM), uno de los dirigentes más criticados por Guerra en recientes reuniones difundidas por los medios de comunicación. Serrano solicitó el encuentro para transmitir a Serra -y para que éste lo comunicara a González- lo ocurrido en las reuniones.

Personas del entorno de Serra señalaron que esa reunión se enmarca "en la coordinación oficiosa que el vicepresidente hace entre partido y Gobierno". "Al igual que cuando antes había un conflicto los dirigentes del partido", señalan, "se entrevistaban con el ex vicepresidente Alfonso Guerra, eso empieza a ocurrir ahora, aunque todavía al 50%". Las fuentes citadas agregan que, en esa función de coordinador, Serra también se entrevistó días atrás con el presidente de la Generalitat valenciana, Joan Lerma, y, posteriormente, con el de Castilla-La Mancha, José Bono.Miembros de la ejecutiva federal reconocen que el conflicto originado por las manifestaciones de Guerra, según las transmitieron diferentes asistentes, ha reavivado el conflicto de la FSM, y se culpa tanto "a leguinistas como a acostistas" de lo sucedido, por las versiones "sin matices que cada sector ha ofrecido".

Dirigentes federales del PSOE consideran que se ha apuntalado la situación anterior, caracterizada por una "calma tensa". De un lado, los dirigentes regionales toman nota de las palabras de Felipe González en el sentido de que "no pasa nada", aunque saben que las turbulencias permanecen. No obstante, algunos asistentes a la reunión de anteayer con González reconocen cierta frustración por que nadie les haya explicado qué ha ocurrido entre González y Guerra.

Medios gubernamentales explicaron ayer que la actitud del presidente es idéntica a la del caso de las cintas grabadas a Txiki Benegas. "SI la persona en cuestión no se hace responsable de lo que dicen que ha dicho, para Felipe González no existen", señaló este portavoz.

Entre tanto, los detractores de Guerra no dudan en interpretar que el vicesecretario general parece decidido a actuar de lleno en el partido y quienes antes eran sus afectos y han dejado de serlo buscan refugio en el vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, la vía adecuada para llegar a González.

Cierre en falso

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La virulencia desatada en la FSM pone de manifiesto el cierre en falso que se realizó en su congreso regional, con una paz impuesta por la ejecutiva federal. Los acostistas se quejan de que se les llame conspiradores porque se han reunido "una vez" con Alfonso Guerra.Representantes de ambos sectores no tuvieron inconveniente en señalar sus discrepancias. El alcalde de Getafe, Pedro Castro, seguidor acostista y miembro de la ejecutiva de la FSM y del Comité Federal, analizó la salud mental de Leguina y sus partidarios asegurando que "no la deben de tener muy clara cuando opinan sobre una reunión a la que no asistieron". Castro dijo: "Es preocupante aseverar sobre cosas que se desconocen, lo que habla poco en favor del nivel de salud mental que tienen, políticamente hablando", informa Luis Fernando Durán.

Por el contrario, el PSOE de Valdemoro difundió un comunicado en el que critica "Ia obcecación de Alfonso Guerra en su enfrentamiento con Felipe González y el conjunto del partido, poniendo en peligro su férrea unidad".

La Portavoz del Gobierno, Rosa Conde, negó la existencia de enfrentamientos en el seno del Gobierno. En declaraciones a la COPE, Conde afirmó:"Ningún Gobierno mantiene unas relaciones tan solidarias como el español, y por eso llevamos tantos año consiguiendo mayoría absoluta". El presidente extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, afirmó ayer que la relación entre el presidente del Gobierno y Guerra no se trató en la reunión del lunes "porque el orden del día lo pone el partido y no la prensa".

El ministro de Cultura, Jordi Solé Tura, se refirió humorísticamente a la situación: "Los tándem cansan, ya que ambos deben pedalear al mismo tiempo, y a lo mejor es preferible que cada uno siga en su bicicleta, pero juntos".

El secretario general de los socialistas gallegos, Antolín Sánchez Presedo, destacó el liderazgo "envidiable" de Felipe González en el PSOE, informa Xosé Hermida. "Mi experiencia", dijo, "me indica que cuando Felipe tocaba el clarín, Alfonso Guerra era el primero en formar en la fila".

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Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

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