Interior pide a Francia que le deje incrementar los policías españoles que siguen a los etarras
La reunión mantenida en Madrid en la noche de] jueves, bajo el peso de los tres atentados ocurridos en la capital ese día, entre los ministros del Interior español y francés, José Luis Corcuera y Philippe Marchand, selló un entendimiento superior al de anteriores encuentros, que podría significar un importante avance en la lucha contra ETA de las autoridades del vecino país, según fuentes conocedoras de dicho encuentro. Corcuera solicitó a su homólogo, según fuentes españolas y francesas, que le permita incrementar la presencia de sus agentes en el país vecino en operaciones de investigación a etarras y que Francia aumente la calidad y cantidad de sus efectivos en esta lucha. Francia no ha contestado aún a estas peticiones.
"Queremos intervenir más en asuntos como escuchas, vigilancias de casas y personas, controles de citas y contactos o seguimiento de sospechosos", resume un mando de la lucha antiterrorista española. Frecuentemente, según estas fuentes, por esta falta de personal francés en la lucha contra ETA, los dispositivos e vigilancia se limitan a los fines e semana, mientras que el resto de la semana se realizan actividades menores, como pueden ser esporádicos controles en carreteras cuya efectividad para investigaciones se juzga muy inferior.En la reunión "hubo de todo", desde quejas españolas por la supuesta falta de participación de las fuerzas de seguridad francesas en la lucha contra. ETA, hasta demandas de un mayor despliegue antiterrorista del país vecino, que se considera que actúa frecuentemente a remolque de investigaciones españolas. Si bien mandos de la lucha antiterrorista niegan que exista permisividad francesa sobre los etarras afincados en su territorio, sí se considera que Francia, como expuso Corcuera, puede hacer un esfuerzo en una doble línea.
Por una parte, según mandos de la lucha antiterrorista, se considera inadecuado el modelo francés aplicado a combatir a ETA, responsabilidad que de manera prácticamente exclusiva recae en la Policía Judicial. Tanto la Gendarmería, como la Policía de Aire y Fronteras, como Renseignemente Generaux (Servicio de Información), según estas fuentes, se limitan a pasar cuanta información poseen a la Policía Judicial, pero -salvo Información- no intervienen en vigilancias, escuchas y labores de seguimiento, tareas juzgadas indispensables para desentrañar la trama de ETA.
"Es como si en España la policía o la Guardia Civil no intervinieran en la lucha contra ETA y se limitaran a pasar los datos que tuvieran al otro cuerpo para que los desarrollase". Esta situación merma los efectivos que Francia enfrenta a ETA. "En el mejor de los casos, no pasan de 50 los agentes que Francia dedica específicamente a luchar contra ETA", explican mandos españoles.
A ello se suma una reivindicación española de una mayor cualificación de los agentes franceses qeu combaten a ETA. "Cuando se hizo hace un año la operación contra Baldo [José Javier Zabaleta Elósegui, número dos de ETA], bajaron desde París al País Vasco francés especialistas en la lucha antiterrorista. Lo que queremos es que siempre estén destacados en esa zona".
En sentido contrario, estos mandos de la lucha antiterrorista plantean que se pueda desplegar una mayor número de efectivos españoles y con mayor capacidad de maniobra en Francia en operaciones contra ETA. Hasta el momento, según estas fuentes, Francia sólo permite que un agente español intervenga en cada operativo, lo que se considera insuficiente.
En relación con las demandas planteadas por Corcuera, se confía en que se produzca en muy breve plazo una respuesta por parte francesa, que se presume favorable.
Reticencias francesas
No obstante, fuentes de la Administración francesa explican que un aumento de los agentes españoles en Francia despertaría reticencias en este país, al interpretarse como una cesión de soberanía, y podría desagradar a los sindicatos policiales franceses.
Mandos de la lucha antiterrorista confirmaron que en esta cumbre antiterrorista se ha pasado información a Francia sobre personas cuya investigación podría conducir a los principales miembros de la dirección de ETA: Francisco Múgica Garmendia, Artapalo -número uno-; José María Arregui Erostarbe, Fitti -encargado de la logística- e Iñaki Bilbao Beaskoetxea, responsable de la dirección de los comandos.
La ministra portavoz, Rosa Conde, anunció ayer que el Gobierno pedirá una mayor colaboración internacional contra ETA e indicó que los efectos de la reunión se verán antes de la cumbre hispanofrancesa del próximo día 25 -algo juzgado demasiado optimista por los expertos-, y un nuevo encuentro Corcuera-Marchand para los próximos días.
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