Las comarcas valencianas afectadas por el temporal recuperan la normalidad
El restablecimiento de la circulación en las carreteras y del servicio telefónico y de agua potable, la limpieza de viviendas y comercios que se inundaron en localidades como Alzira, Algemesí, Almussafes, Benifaió o Alginet y la evaluación de los daños son las tareas que centraron ayer la actividad en las comarcas valencianas, sobre todo La Ribera y L'Horta Sud, que sufrieron la noche del viernes lluvias de más de 200 litros por metro cuadrado. Renfe informó que la línea férrea Valencia-Madrid estará cuatro días interrumpida.
Llegaron a caer, entre la tarde y la noche del viernes, cerca de 240 litros por metro cuadrado en Algemesí, lo que da una idea de la intensidad de las precipitaciones registradas en la zona central del País Valenciano. En Valencia, cayeron 58 litros por metro cuadrado. Ayer fueron desactivadas todas las alertas de Protección Civil, que en algún momento decretó la situación dos.Los vecinos de barrios como Les Basses y Venécia, en Alzira ' ciudad que estuvo varias horas incomunicada por carretera a lo largo de la noche, así como de otras poblaciones de la comarca de La Ribera, se aplicaron en la mañana de ayer a la tarea de limpiar el barro depositado por las aguas, que llegaron a alcanzar casi un metro de altura. Los bomberos realizaron aún numerosas salidas para achicar la inundación de sótanos y garajes.
La retirada de vehículos que fueron arrastrados por las aguas -algunos aparecieron en medio de campos de naranjos-, la reparación del firme de las carreteras en algunos puntos, en los que sufrió graves desperfectos por el empuje de las aguas, y la limpieza de calles centraron la actuación de los efectivos de los ayuntamientos, la Diputación de Valencia, la Generalitat y la Delegación del Gobierno.
Barrancos y torrenteras
El río Júcar llevaba ayer un caudal bastante exiguo a su paso por La Ribera, lo que señala que los daños fueron provocados por la extremada intensidad de las lluvias, que se desbordaron por barrancos y torrenteras en la parte baja de su cauce. Precisamente, para tener una primera impresión sobre los efectos del temporal, recorrieron a mediodía de ayer en helicóptero las zonas afectadas el delegado del Gobierno, Francisco Granados, y el consejero de Administración Pública, Emerit Bono.Pedro Grande, teniente de alcalde de AlzIra, señalaba pocas horas antes de la visita de Granados y Bono a la capital de La Ribera, que la situación se estaba normalizando. "Esto no ha sido una riada", afirmó el edil, "lo que pasa es que ha caído una gran cantidad de agua". Según Grande, pese a que la ciudad cuenta con un sistema de colectores de mucha capacidad, en laszonas bajas no pudo absorber el ingente caudal que anegó las calles.
La coincidencia del temporal con el inicio del fin de semana creó un auténtico caos en las carreteras, colapsó la ciudad de Valencia y obligó a numerosas viajeros a buscar refugio. Emisoras de radio, como la autonómica Canal Nou, acogieron a lo largo de la noche una Ininterrumplda sucesión de llamadas de personas que se interesaban por la suerte que pudieran haber corrido amigos.o familiares.Por otra parte, cerca de 17.000 usuarios de Cullera, Sollana, Alginet y Benifaió recobraron durante el día de ayer el servicio de teléfono, cortado debido a la avería en una central a la que no se pudo acceder por la noche, según informó la compañía telefónica.
Renfe informó, finalmente, que hasta dentro de cuatro días no se restablecerá la línea entre Valencia y Madrid, por Albacete. El transporte se realiza de Valencia a Xátiva por carretera y de Xátiva a Madrid, en tren.
