"No habrá compromiso político con las demás repúblicas"
Moldavia, como la URSS en general, enfrenta una grave crisis económica agudizada por serios problemas políticos. Tiene en su territorio dos repúblicas autoproclamadas, no reconocidas oficialmente: la República de los Gagaúzes, en el sur, y la República del Dniéster, en la orilla izquierda de este río, donde viven mayoritariamente rusohablantes. En medio de la crisis causada por el arresto de los líderes de estos Estados autoproclamados, Valeriu Muravschi recibe a este periódico en su despacho de a Casa de Gobierno, ubicado en a plaza donde hasta hace poco e alzaba una gran estatua de Lenin, hoy desaparecida, al igual que el partido que éste fundara.Pregunta. ¿Hasta qué punto Moldavia está dispuesta a firmar el acuerdo económico propuesto por Moscú a todas las repúblicas que formaban la URSS?
Respuesta. Ante todo, permítame señalar que hace ya más de un año que nosotros nos declaramos partidarios de comenzar por una comunidad económica para tratar de resolver los problemas que enfrentamos. Y ello porque somos conscientes de que la economía moldava está integrada a las economías de las otras repúblicas de la ex Unión Soviética. Pero, por desgracia, también desde un comienzo el poder central se negó categóricamente incluso a estudiar esta posibilidad. Creo que esta posición hizo que no se solucionaran también una serie de otros problemas que podrían haber sido resueltos. Pero hoy ha sucedido lo que ha sucedido, nuestra declaración de independencia es conocida y comprendemos cuán difícil será este proceso. En todo caso, sabemos claramente por lo menos el actual Gobierno que no firmaremos nada relacionado con aspectos políticos. Sin suscribir ningún tratado político, nosotros deseamos participar en la elaboración de un acuerdo económico con todas las repúblicas, tomando en consideración nuestro grado de integración con ellas y nuestro interés en obtener suministros desde otras regiones de la ex URSS. Somos partidarios de coordinar los programas económicos por lo menos en una primera etapa, en lo que se ha dado en llamar periodo de transición. Más aún cuando, además de la integración económica existente, tenemos todavía un sistema financiero-crediticio común y una moneda común. Pero esto no significa que no haremos esfuerzos para resolver de nuestro modo aquellos problemas económicos, financieros, del sistema bancario, etcétera, que son propios de los países independientes.
P. ¿Cuáles son las principales dificultades que hoy enfrenta Moldavia y qué medidas piensa tomar el Gobierno para solucionarlas?
R. Aunque yo no lo pondría en un primer lugar, es indudable que existe actualmente el problema del Transdniéster, que de una manera u otra influye en la economía y en el curso de las reformas. Pero, como digo, no lo pondría en el primer plano. Lo principal en el plano económico hoy es aprobar un paquete de leyes que permita regular nuestro desarrollo interno y exterior y paralelamente ir reformando la economía. El viejo sistema socialista nos mostró lo que vale; no idealizamos vuestro sistema y no pensamos copiarlo en un ciento por ciento, pues hay que tener en cuenta nuestra realidad, comenzado por nuestra mentalidad y terminando por la estructura de nuestra industria. Pero de lo que no hay duda es de que debemos avanzar hacia una economía de mercado. Nosotros ya habíamos adoptado una concepción para realizar este paso, pero ella partía de la base de que Moldavia seguía formando parte de la URSS. Ahora la situación ha cambiado y es preciso hacer las correcciones correspondientes. Hay que tomar en cuenta que la independencia política. está relacionada con la independencia del sistema financiero crediticio. Y si pensamos así, al primer plano sale el problema de crear una moneda nacional propia. Esto es algo sumamente complejo y comprendemos que no sabemos todo en esta dirección. Por eso pensamos traer a especialistas de otros países, ante todo de Rumania, para que nos ayuden.
P. Una serie de líderes y dirigentes moldavos dicen que el objetivo final es la reunificación con Rumania. ¿Está usted de acuerdo y, si es así, qué medidas se deben tomar?
R. Sí, éste es un problema que se plantea a diferentes niveles, pero . yo pienso que si es eso lo que queríamos, ¿por qué no se plantéo entonces de inmediato la tarea de la reunificación, para qué declaramos independientes? Creo que, primero, no en vano hemos declarado la independencia y, segundo, Rumania fue el primer pais que la reconoció; es decir, de iure existen dos Estados. Claro que hay diferentes opiniones y, al fin y al cabo, es el pueblo, a través de un referéndum, el que debe decir lo que de sea. Al mismo tiempo, consideramos que debemos integrar nuestra economía con la de Rumania y emprendemos pasos concretos en esta dirección, para no hablar ya de las relaciones culturales, científicas, de educación, etcétera, teniendo en cuenta que poseemos un mismo idioma y una misma historia.
P. Esta aspiración a integrarse ante todo con Rumania, ¿no creará problemas a la hora de firmar el acuerdo económico con las otras repúblicas que formaban la URSS?
R. Difícilmente, porque aun que hemos hecho más fácil el paso de las personas por la frontera con Rumania, las aduanas siguen en pie. Y en el futuro próximo no las eliminaremos, por que ello sería utilizado por la economía sumergida e incluso podría influir negativamente en la economía rumana. Además, el proceso debe ser paulatino, por que hay que tener en cuenta que durante decenios se nos Inculcó el odio hacia Rumania, por lo visto para separarnos, para que no pensáramos que somos un mismo pueblo. Y hoy existe en Ciertas capas de la población una desconfianza hacia Rumania. Pero con el tiempo las cosas irán cambiando. Por lo demás, todas las repúblicas desean integrarse con otros países. ¿Qué le importa, por ejemplo, a Ucrania que nosotros lo hagamos con Rumania? P. ¿Qué hacer con el problema de la República del Diniéster?
R. Creo que la fórmula por la que han optado en el Transdniéster, es decir, declarar una república y proponer una federación en nuestra pequeña Moldavia, no tiene a su favor ningún argumento, ni lógico ni histórico ni legal. Puedo estar de acuerdo en que debemos resolver el problema de los gagaúzes, creando, por ejemplo, alguna forma de autonomía, porque ellos no tienen patria y, aquí viven en una región más o menos compacta. Moldavia fue agredida: por los turcos, los mongoles, los kazacos, los polacos, etcétera. Porque nuestra república está en un lugar estratégico, es la llave a los Balcanes, al mar Negro, al Danubio. Por eso siempre los más fuertes tuvieron interés en apoderarse de nuestras tierras.
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