Las multitudes eliminan los símbolos relacionados con el partido comunista
El hundimiento de las estructuras comunistas, la eliminación de su simbología de los lugares públicos a manos de multitudes y la dimisión de altos cargos del PCUS se extendió ayer a lo largo y ancho de la Unión Soviética. Las repúblicas de Estonia y Moldavia declararon ilegales las actividades del partido, decisión en la que seguían a Lituania y Letonia. Poco después era el propio Gorbachov quien anunciaba su dimisión al frente de la secretaría general de un PCUS que era, a su vez, disuelto.
La caída en picado de] partido -tras el fracasado golpe de Estado de ocho halcones comunistas- y el abandono de sus dirigentes se producía horas antes de que la agencia Interfax anunciase que Mijaíl Gorbachov se disponía a dimitir al frente de la secretaría del PCUS y a anunciar la disolución de éste.Estatuas y monumentos de los fundadores e ideólogos del sistema comunista fueron expeditivamente retirados de sus pedestales por miles de manifestantes, y en su lugar quedaron consignas anticomunistas y leyendas que recordaron los horrores estalinistas.
La destrucción de la simbología del anterior régimen y la clausura de muchos de sus edificios e instituciones se repite de ciudad en ciudad.
En Moscú, un enorme monumento de bronce y granito levantado cerca del Kremlin en honor de Yákov SverdIov, primer jefe de Estado de la Unión Soviética [en realidad, el primer jefe de Estado fue Kamenev, pero sólo durante 24 horas y Sverdolv es unánimemente considerado como el primero] y hombre muy cercano a Lenin, fue derribado en presencia de cerca de 2.000 moscovitas que gritaban: "¡Abajo, abajo!".
El jueves, la estatua del fundador del Comité de Seguridad del Estado había sido también demolida. La efigie de Mijaíl Kalinin, presidente del Presídium Supremo de la URSS durante la epoca de Stalin, corrió la misma suerte en la avenida que llevaba su nombre.
Cae también Marx
Por su parte, un grupo de concejales del Ayuntamiento de Leningrado, junto con la policía de esta localidad, finalizó ayer los trabajos de cierre del edificio Smolni, sede del comité regional del PCUS. En el interior del edificio se establecieron centinelas del cuerpo de policía para impedir que los comunistas retirasen documentos comprometedores sobre el golpe de Estado.El turno de desaparición llegó incluso a Marx. Un monumento a la gloria de Carlos Marx y Federico Engels fue arrancado de su base por orden de las autoridades moldavas en su sitial de la sede del partido comunista de la república, en el centro de la capital, Kichinmev. En Vilna, capital de Lituania, una estatua gigantesca de Lenin fue derribada en medio de los gritos de alegría de la multitud. Estas acciones se repitieron por las tres capitales bálticas.
La independentista Moldavía, además de ilegalizar el partido comunista -ya ilegalizado en las también independentistas repúblicas bálticas-, aprobó la nacionalización de todas sus propiedades. "Todas las propiedades del partido y sus edificios están siendo nacionalizados, y ha sido establecida una comisión para organizar todo este proceso", informó un portavoz oficial.
El Parlamento de Ucrania, que con el anuncio de la proclamación de independencia afiadía un elemnto más a la desintegración del Estado que el parido unificaba, se reunió para estudiar la clausura de edificios del PCUS y discutir un proyecto de resolución sobre la custodia de los archivos. En la sesión, el presidente de Ucrania y miembro del PCUS anuncló su renuncia de los órganos directivos del partido. En su comparecencia, precisó, sin embargo, que mantenía la militancia de base. En la misma jornada, el comité de base del PCUS del Sóviet Supremo había decidido su autodlsolución.
El partido comunista sufrió nuevas humillaciones cuando otras repúblicas aplicaron medidas en su contra y desde diversos sectores aumentaron las denuncias contra la complicidad de altos cargos en el movimiento involucionista. En Azerbalyán, la policía tuvo que intervenir para controlar una violenta concentración de manifestantes en Bakú que celebraban el fracaso del golpe de Estado contra la perestroika y la apertura. Siete personas resultaron heridas. Sus promotores, del movimiento independentista Frente Popular, exigen una investigación sobre el papel jugado por el presidente azerbaiyano, Ayaz Mutalibov, dirigente comunista local, en el frustado golpe.
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