George Bush da las gracias a Irán y a Siria
El presidente norteamericano, George Bush, alabó ayer en Kennebunkport (Maine) la labor de Irán y de Siria para desbloquear el conflicto de los rehenes en Iíbano, y sugirió a Israel y a los demás países de la zona que dejen en libertad a todos los "inocentes", encarcelados por cuestiones políticas, independientemente de su nacionalidad.La noticia del fin del secuelstro de Edward Tracy era esperada y deseada en la mansión (de Bush en Kennebunkport desde el pasado martes, cuando los primeros rumores procedentes de Damasco indicaban que dos rehenes occidentales iban a ser puestos en libertad.
El presidente, que en ningún momento dio señales de optimismo a las familias de los rehenes, sí ordenó un seguimiento del tema a sus más próximos colaboradores. Su primera semana de vacaciones ha estado de hecho dedicada a intentar desbloquear esta crisis.
Marlin Fitzwater, el portavoz del presidente, declaró, a los pocos minutos de confirmarse la puesta en libertad de Tracy, que el presidente estaba "contento con la noticia" y que compartía "la felicidad de la liberación con los familiares del rehén". Tracy, definido como un cazador de fortunas, autor y vendedor de libros, tiene 60 años y fue secuestrado el 21 de octubre de 1986 por miembros de la denominada Organización de la Justicia Revolucionaria en Líbano.
Cuestiones pendientes
Fizwater dijo que Bush sIgulóel desarrollo de los acontecimieiltos en Beirut durante toda la noche, hasta que Tracy estuvo, de madrugada, en manos de funcionarios norteamericanos. Añadió que el ex rehén será trasladado hasta Weisbaden (Alemania), donde ún equipo médico, en el que no faltan psicólogos y psiquiatras, le examinará, antes de volver a EE UU.
Bush respondió con conturidencia cuando un periodista le preguntó si se dirigía de forma especial a Israel cuando hizo la peticlón de que los presos detenidos por cuestiones políticas en Oriente Próximo sean puestos en libertad. "Todos los países que tienen rehenes deberían ponerlos en libertad; se debería liberar a todas las personas que se encuentran encarceladas o retenidas por procedimientos ilegales", dijo Bush, "Espero que pronto se vea claro y sé reconozca que mantener rehenes es una forma contraproducerite de hacer política".
Sobre la relación bilateral que mantiene Washington con los Gobiernos iraní y sirio, a los que agradeció su papel en esta crisis, Bush declaró: "Aún hay varias cuestiones con esos países que continúan sin resolverse, pero vemos [la liberación de rehenes] como un paso positivo, aunque no podemos normalizar completamente las relaciones mientras existan personas retenidas contra su voluntad".
Para el presidente, los pasos que se están dando para pacificar Oriente Próximo desde el fin de la guerra del Golfo son el "factor clave" para desbloquear la crisis de los rehenes.
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