Los bancos acreedores de La Seda, salvo Banesto y los extranjeros, se querellan contra Akzo
La crisis de La Seda de Barcelona vivió ayer un nuevo capítulo con dos vertientes. Por la mañana no se pudo constituir la junta de accionistas por falta de quórum, en medio de tumultuosas acusaciones contra el propietario del 57,5% de las acciones, Jacinto Soler Padró. Por la tarde, el Bank of America y los bancos españoles acreedores de La Seda, con la única excepción de Banesto, anunciaron la presentación ayer mismo de una querella criminal contra la multinacional Akzo, a la que acusan de haber ejercido sobre La Seda un uso abusivo de su mayoría accionaríal.
La querella ha sido presentada por el Bank of America, La Caixa, Cajamadrid, Bankinter, Banca Catalana y la Caja Provincial de Tarragona. No han apoyado esta iniciativa ni Banesto ni los demás bancos extranjeros acreedores, es decir, ABN Bank (a la que se le deben 415 millones), Citi Bank (alrededor de 850) y Barclays (415). El representante de los bancos querellados, el abogado Rafael Jiménez de Parga, justificó la actitud de estos bancos "por los vínculos que les unen a Akzo en otros países". La posición de Banesto era explicada en privado porque la entidad que preside Mario Conde y dirige en Cataluña Josep Maria Xercavins ya ha cubierto su deuda de 500 míllones con La Seda a través del descuento de letras de cambio que retuvo para sí. Banesto posee alrededor del 2,5% del capital de La Seda a través de la Corporación Industrial.La querella acusa a Akzo de los presuntos delitos de estafa, alzamiento de bienes, delito contra la seguridad en el trabajo y alteración del precio de las cosas y va contra los tradicionales representantes de Akzo en La Seda: Piet Provó Kluit (director general), Aarnout Loudon, Willem Meyberg y Udo Stark (consejeros). Los querellantes justificaron la no presentación de acciones judiciales contra los consejeros españoles y, más concretamente contra el presidente, Lorenzo Gascón, porque la dimisión de los primeros evitó que Akzo pudiera presentar la suspensión de pagos o la quiebra de La Seda a mediados de julio, tal y como era su intención.
Akzo fue sancionada por la CE con una multa de 1.300 millones de pesetas en diciembre de 1985 por haber intentado expulsar del mercado a la firma filial inglesa Engineering Chemical Supplies (ECS).
Dudas de la Comisión
La Bolsa de Barcelona informó ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) de que la operación de compraventa del 57,5% del capital de La Seda realizada el pasado viernes entre Akzo y el abogado Jacinto Soler Padró no ha contado con la intervención de una sociedad o agencia miembro de la Rectora de la Bolsa, tal y como exige el artículo 36 de la Ley del Mercado de Valores.La Bolsa informó también a la CNMV de que la operación no ha aparecido, como es preceptivo, en el Boletín de Cotización, según exige el artículo 37 de la Ley del Mercado de Valores. El incumplimento de estas dos condiciones podría hacer la transacción nula de pleno derecho, según la Bolsa. Ambas informaciones fueron requeridas por la CNMV dentro de las averiguaciones que la autoridad bursátil está realizando antes de pronunciarse sobre la validez de la operación.
Soler Padró no logró asistir ayer como titular del 57,5% de La Seda a la junta de accionistas. El consejo, a pesar de reconocerle la propiedad de estas acciones, le negó la titularidad, ya que según su argumentación 11 están depositadas en Banesto a nombre de Enka Holding, tenedora de los títulos de Akzo". En base a esta interpretación legal, Soler Padró no pudo demostrar la titularidad de sus acciones.
