El Gobierno de Filipinas autoriza el regreso a su país de Imelda Marcos

El Gobierno filipino autorizó ayer el regreso a su país a Imelda Marcos, de 62 años, viuda del depuesto dictador Ferdinand Marcos, fallecido en el exilio en 1989. El propósito de las autoridades de Filipinas al permitir el retorno de la familia Marcos es iniciar un proceso judicial contra sus miembros, a los que acusa de delitos civiles y criminales.

/ Nueva York El Gobierno filipino encargó a la fiscalía del Estado, simultáneamente a la medida que permite el regreso de Imelda, que presente de inmediato "los cargos por fraude fiscal y delitos criminales" contra la viuda del dictador fallecido, informó el secretario de la presidencia, Franklin Drilon.En Nueva York, donde reside Imelda Marcos, James Linn, abogado de la familia, declaró que la noticia se recibió con alborozo, y la viuda del ex presidente manifestó que por fin "sus plegarias habían sido oídas"; y añadió que tan segura es su vuelta a Filipinas "como que el sol sale todos los días para hacer frente a un juicio en esta ocasión del Gobierno de Corazón Aquino". El letrado aseguró que la medida de Manila "es para Imelda como un sueño que finalmente se hace realidad".

Drilon, por su parte, comentó a los periodistas que las autoridades filipinas no permitirán el regreso de los restos mortales de Ferdinand Marcos -que falleció en Hawai- y una vez que la familia del ex dictador se encuentre en el país no se les permitirá la salida, "con el fin de que la justicia siga su curso (...), de modo que se termine con el fantasma de la dictadura".

Procesos en EE UU

Desde su salida apresurada de Filipinas, en 1986, como consecuencia de una sublevación popular apoyada por mandos del Ejército, la farnilia Marcos hizo frente a varios procesos en el interior de Esta.dos Unidos, país que escogieron como destino de su exilio.El año pasado, Imelda Marcos fue declarada inocente por un tribunal de Nueva York de varios delitos de estafa y fraude, lo mismo que el magnate y traficante de armas Adnan Kashogui -quien ha regresado recientemente a España para reclamar la devolución de algunas de sus propiedades en la costa de Málaga-, que tenja negocios comunes con el matrimonio Marcos, al que el Gobierno de Corazón Aquino acusa de apropiación indebida de 10.000 millones de dólares durante el mandato dictatorial de 1965 a 1986.

A manera de justificación para no conceder permiso para el traslado del cadáver de Ferdinand Marcos, Drilon afirmó que sus partidarios pueden utilizarlo con fines políticos. "El momento [para el retorno de los restos] no es el apropiado", señaló el secretario de la Presidencia; y agregó: "Ahora la medida es buena para el pueblo filipino y desconocemos hasta cuándo permanecerá en vigor".

Pese al encausamiento judicial de Imelda, el Gobierno del archipiélago permitirá a la viuda de Marcos viajar libremente por el país "e incluso presentar su candidatura a la elección presidencial, si reúne los requisitos imprescindibles".

Imelda Marcos es depositarla de la confianza de los nostálgicos de la dictadura; para el senador John Osmena no cabe la menor duda de que Filiponas camina "hacia una batalla electoral entre dos viudas, de la Marcos y la de Aquino, en las elecciones legislativas de 1992".

Varios políticos filipinos se mostraron partidarios del pronto regreso de los restos de Ferdinand, "porque ya es hora de acabar con esto, que es lo verdaderamente importante", dijo Leticia Shanghani, presidenta del comité parlamentario de relaciones exteriores.