Cuadros en un maletero

Dos de los 20 cuadros sustraídos el pasado 14 de abril en Amsterdam permanecen aún en el taller de restauración del Museo Van Gogh. Se trata de Naturaleza muerta con biblia (1885) y Trigal con cornejas (1890). De este último la leyenda tejida alrededor de la vida del pintor dice que fue también su obra postrera. Un tercer lienzo, Bodegón con limones, peras y uvas (1887), fue devuelto a la galería principal y forma -parte ahora de una muestra dedicada a la influencia japonesa en la obra del artista.El frenético viaje -dentro de una bolsa de deportes y apretados en el maletero de un coche- a que fueron sometidos los cuadros robados resultó casi fatal para los dos lienzos más dañados. Ambos presentan erosiones en la tela y la pintura ha saltado en algunas partes. En el fondo oscuro del bodegón de la biblia aparece también una rasgadura. Según Cornelia Peres, restauradora jefe del centro, si todo va bien las obras estarán listas en septiembre u octubre. Como las demás, serán colocadas tras un cristal, práctica iniciada durante la antológica del pintor celebrada el pasado año.

Otras tres pinturas firmadas por Van Gogh han corrido peor suerte. Robadas la madrugada del 28 de junio de 1990 del museo Noordbrabant, en Den Bosch, al sur de Holanda, aún no han podido ser recuperadas. La esposa del granjero, Molinos de agua en Gennep y Campesina sentada fueron pintados entre 1884 y su valor ronda los 825 millones de florines.

En este caso, los ladrones penetraron en el museo por una ventana de la planta baja. En la sala de los van gogh la alarma no funcionó.