Zapatero suspende una conferencia en Moscú al acudir sólo cuatro soviéticos

P. B. / l. C. Virgilio Zapatero, ministro de Relaciones con las Cortes, desistió ayer de dar personalmente su conferencia en los Cursos de Verano de la Universidad Complutense de Madrid que se celebran en Moscú en vista del escaso público reunido en la sala -cuatro personas soviéticas-, un auditorio perteneciente a la Academia de Ciencias Sociales del Comité Central del Partido Comunista de la URSS (PCUS), según manifestó un testigo presencial.

Zapatero hizo acto de presencia en el auditorio a las cinco de la tarde, donde había cuatro personas y, tras aguardar varios minutos, se marchó, según aseguró el testigo. Justo Villafañe, director del Instituto de Cultura y Ciencia Soviética, entidad promotora de los cursos, manifestó sin embargo que Zapatero no había dictado su conferencia por encontrarse indispuesto. En la sala había unas 45 personas, según su versión. El profesor Elías Díaz apareció en compañía de Alfonso Guerra y después de explicar que el ministro estaba indispuesto leyó el texto que éste tenía preparado.La escasez de público en los cursos puede considerarse una consecuencia de la poca publicidad que ha rodeado el evento entre los sectores políticos potencialmente interesados en él.

El presidente de Banesto, Mario Conde, que inauguró los cursos, se entrevistó el lunes con el jefe del Gabinete soviético, Valentín Pávlov, y con el presidente de la URSS, Mijaíl Gorbachov, con quien discutió sobre posibilidades de colaboración económica sobre una base a largo plazo. Abandonar el PCUSEl académico Stanislav Shatalin, que fuera consejero del presidente Mijaíl Gorbachov, invitó a sus conciudadanos a abandonar el Partido Comunista de la URSS y a incorporarse al Partido Unido Democrático ayer en otra conferencia de los Cursos de Verano. El presidente del Gobierno español, Felipe González, causó una honda impresión a Shatalin. Éste dijo que le había gustado especialmente la concepción de la democracia que tiene González. No se trata, dijo Shatalin, de la ausencia de conflictos, sino de reconocer su existencia y resolverlos de forma civilizada.

Para hoy están previstas las intervenciones del ministro de Cultura, Jordi Solé Tura, y de Santiago Carrillo, quien recibió con satisfacción la pregunta formulada a González por Borís Oleinik, miembro del Presídium del Sóviet Supremo de la URSS. Oleinik inquirió sobre el papel del Partido Comunista de Espafia en la transición a la democracia, y ello permitió que el jefe del Gobierno elogiara la participación comunista en ese proceso.

El presidente del PP, José María Aznar, manifestó ayer que el intento de reescribir la historia de la transición española desde la óptica socialista es "históricamente, un disparate". González aseguró que la transición "devoró a sus protagonistas", en referencia a Carrillo y Suárez. Las declaraciones del presidente, según Aznar, son "bastante desafortunadas, sectarias y partidistas", informa Efe. Javier Rupérez, diputado de esta partido, declaró al respecto que "es de una mezquindad incalificable el irse a Moscú para intentar subrayar el papel propio en la transición y minimizar el de los demás, porque hay un protagonista real de la transición democrática que es Adolfo Suárez". Por su parte, Josep Antoni Duran i Lleida, de Unió Democrática de Catalunya, consideró "absurdo" que miembros del Gobierno intervengan en la URSS en el curso "de manos del PCUS y subvencionando a este partido para que organice el encuentro".