Pasión tremenda

Nuevo espectáculo de Blanca del Rey, después de un año en que pudo bailar muy poco por problemas físicos. El título Pasión flamenca va de maravilla a la propia pasión de Blanca por un arte que para ella es vida.Hay una pasión tremenda en todo lo que hace esta mujer en el escenario, igual en la profunda tragedia de la siguiriya que en el leve juego del abanido en la guajira. El baile de Blanca del Rey es una constante invitación al ensueño. Un baile de rara calidad en que la perfección técnica, la inventiva en permanente ejercicio, jamás entorpecen el toque mágico del duende o el ángel, la jondura que nos desgarra el alma o la gracia que nos eleva al más feliz de los mundos. El baile de Blanca del Rey es eso y mucho más, es uno de esos goces superiores cuyo disfrute nos reconcilia con la tristeza y el tedio de horas interminables de otro flamenco. Que, sorprendentemente, asoma la oreja en este rnismo espectáculo, por culpa de algunos miembros del grupo que no están a la altura del mismo, especialmente entre los bailaores.