IU denuncia que los socialistas usaban la sanidad andaluza para financiarse
El presidente de Izquierda Unida-Convocatoria por Andalucía (IUCA), Luis Carlos Rejón, denunció ayer que los responsables de Malesa y Filesa, empresas ligadas a la presunta financiación irregular del PSOE, mantenían contactos con un despacho de abogados que era "una oficina paralela" del Servicio Andaluz de Salud (SAS). Según Rejón, el despacho de abogados de Manuel Domínguez Moreno, conocido como D-1, poseía "tampones, cartas, libro de registro de entradas y salidas del SAS, tarjetas y folios con membretes". El PSOE se opuso ayer a que el Parlamento regional crease una comisión investigadora sobre la presunta financiación de ese partido a través de la sanidad andaluza.
Luis Carlos Rejón vinculó a la empresa D-1 con Filesa y aseguró que la conexión de esta última Firma en Andalucía "es el casino de Sevilla", concedido a la sociedad Casino Los Naranjos SA, que finalmente no se va a construir", según Rejón.
El portavoz de IU-CA afirmó que durante la feria de Bollullos del Condado (Huelva) de 1988, Manuel Domínguez Moreno le había presentado a él mismo, en presencia del diputado de la coalición Diego Valderas, a Alberto Flores "como socio de D-1 y del Casino Los Naranjos". Alberto Flores, hermano de la secretaría de Relaciones Internacionales del PSOE, Elena Flores, posee el 60% de las acciones de la empresa Malesa, propietaria a su vez de Filesa y Time Export, sociedades a las que se le atribuye la financiación irregular del PSOE.
Mientras, un portavoz de la Consejería de Gobernación de la Junta andaluza confirmó ayer que se había revocado la concesión de un casino de juego a la sociedad Los Naranjos S. A, presidida por el militante socialista Rafael Álvarez Colunga.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.